Luna azul, dos lunas llenas el mismo mes
De acuerdo con el folclore y las tradiciones, el término luna azul existe desde hace 400 años. La primera referencia a este evento lunar fue concebido como el germen de un suceso poco probable, o algo que nunca podría suceder. Con el tiempo, el término ha evolucionado para significar algo que rara vez ocurre.
A pesar del nombre, no se produce en la luna ningún cambio físico. Durante el proceso de la luna azul no es que la luna tome este color. Una luna azul se produce cuando hay dos lunas llenas el mismo mes del calendario. Este acontecimiento lunar ocurre aproximadamente cada dos años y medio.
Un ciclo lunar completo, el tiempo entre una luna llena y una luna nueva es de 29,5 días, que nos da una luna llena cada mes. A medida que los meses van siendo un poco más largos que las fases lunares, las lunas llenas se producen un poco antes cada mes.
El origen del término luna azul, aunque inmerso en el folclore, ha cambiado de significado con el tiempo. Históricamente a cada luna del año se le daba un nombre popular, para así ayudar a la gente a prepararse para la próxima temporada.
Había nombre de luna para aquellas que estaban más cerca del equinoccio de otoño, justo en el momento en el que los agricultores trabajaban hasta altas horas de la noche, gracias a la luz de la luna. Esto también marcaba el tiempo para recoger la cosecha de la temporada y prepararse para el invierno siguiente.
Muchos de los cuentos populares tratan de explicar el fenómeno de la luna azul. Según algunos de ellos, se dice que la luna hablaba a los hombres con su luz, y por eso era azul. Algunas creencias paganas piensan que la luna azul tiene tres veces la fuerza de una luna llena normal, ya que simboliza a la abuela de alguna diosa.
Muy rara vez se da en un mismo año dos lunas azules. Debido a que el mes de febrero es el único cuya duración es inferior al ciclo lunar, la primera siempre se produce en enero y la segunda, en orden decreciente de probabilidad, en marzo, abril o mayo, las lunas azules se producen sobre todo en enero y marzo. La última vez que hubo dos lunas llenas en el mismo año fue en 1999. Las siguientes lunas azules se producirán en agosto de 2012, julio de 2015, enero y marzo de 2018, octubre de 2020, agosto de 2023, mayo de 2026, diciembre de 2028...
Astrológicamente, la energía y la fuerza de la luna llena se asocia a la armonía e integra las contradicciones en nosotros mismos y en los otros. Durante una luna llena, las semillas sembradas en la última luna nueva están listas para ser cosechadas y utilizadas. Tradicionalmente, la luna llena se ve como un tiempo para la meditación, especialmente de las cuestiones personales.
Durante una luna azul, se dice que la fuerza es el triple, mayor que una luna llena normal. En algunas culturas, esta segunda luna llena era considerada sagrada, un momento en el que la capacidad de comunicarse con los dioses y diosas era muy poderosa. Se consideraba un tiempo muy espiritual, tiempo sobre todo para la oración y la meditación.
De acuerdo con el folclore y las tradiciones, el término luna azul existe desde hace 400 años. La primera referencia a este evento lunar fue concebido como el germen de un suceso poco probable, o algo que nunca podría suceder. Con el tiempo, el término ha evolucionado para significar algo que rara vez ocurre.
A pesar del nombre, no se produce en la luna ningún cambio físico. Durante el proceso de la luna azul no es que la luna tome este color. Una luna azul se produce cuando hay dos lunas llenas el mismo mes del calendario. Este acontecimiento lunar ocurre aproximadamente cada dos años y medio.
Un ciclo lunar completo, el tiempo entre una luna llena y una luna nueva es de 29,5 días, que nos da una luna llena cada mes. A medida que los meses van siendo un poco más largos que las fases lunares, las lunas llenas se producen un poco antes cada mes.
El origen del término luna azul, aunque inmerso en el folclore, ha cambiado de significado con el tiempo. Históricamente a cada luna del año se le daba un nombre popular, para así ayudar a la gente a prepararse para la próxima temporada.
Había nombre de luna para aquellas que estaban más cerca del equinoccio de otoño, justo en el momento en el que los agricultores trabajaban hasta altas horas de la noche, gracias a la luz de la luna. Esto también marcaba el tiempo para recoger la cosecha de la temporada y prepararse para el invierno siguiente.
Muchos de los cuentos populares tratan de explicar el fenómeno de la luna azul. Según algunos de ellos, se dice que la luna hablaba a los hombres con su luz, y por eso era azul. Algunas creencias paganas piensan que la luna azul tiene tres veces la fuerza de una luna llena normal, ya que simboliza a la abuela de alguna diosa.
Muy rara vez se da en un mismo año dos lunas azules. Debido a que el mes de febrero es el único cuya duración es inferior al ciclo lunar, la primera siempre se produce en enero y la segunda, en orden decreciente de probabilidad, en marzo, abril o mayo, las lunas azules se producen sobre todo en enero y marzo. La última vez que hubo dos lunas llenas en el mismo año fue en 1999. Las siguientes lunas azules se producirán en agosto de 2012, julio de 2015, enero y marzo de 2018, octubre de 2020, agosto de 2023, mayo de 2026, diciembre de 2028...
Astrológicamente, la energía y la fuerza de la luna llena se asocia a la armonía e integra las contradicciones en nosotros mismos y en los otros. Durante una luna llena, las semillas sembradas en la última luna nueva están listas para ser cosechadas y utilizadas. Tradicionalmente, la luna llena se ve como un tiempo para la meditación, especialmente de las cuestiones personales.
Durante una luna azul, se dice que la fuerza es el triple, mayor que una luna llena normal. En algunas culturas, esta segunda luna llena era considerada sagrada, un momento en el que la capacidad de comunicarse con los dioses y diosas era muy poderosa. Se consideraba un tiempo muy espiritual, tiempo sobre todo para la oración y la meditación.