¡Hola qué tal querida comunidad!

Para todos aquellos que aún no hayan leído el tema publicado ¡Aviso importante! os invito a revisar el tema. Lo dicho ahí aplica acá igualmente y aunque hay mucho por decirse, para ponernos al día, de momento dejo en manifiesto la voluntad de ampliar esfuerzos por extender la difusión y continuar explicando como enseñando el espiritismo y fenomenología para que este esté al acceso de todos los que lo necesiten.

No voy a extenderme a presentarme otra vez. He vinculado 2 enlaces para contextualizar el fin de este tema y vídeo vinculado. Invito a ingresar en ambos para ponerse al día.

En este corto podcast estamos tratando principalmente el tema de ¿qué es el culto a María Lionza? Más de lo que detallar cómo se lleva a cabo este, ya que ello hace parte de los criterios prácticos más adelante a ser desglosados. Sin embargo, exponemos un poco los matices antropológicos y también la evolución hacia la forma de culto bajo el sistema espiritista que puede aportar algo a la cultura general de quienes desean poder responder lo relacionado al culto respecto a este tema en particular.



Agradezco su comprensión y solicito su apoyo. Y si hay alguien de buena voluntad en la disposición de redactar lo hablado, ¡bienvenido sea! Y sépanlo, es una forma de realizar culto y entregar simpatía, principalmente si se ofrece a esta o aquella espiritualidad o personaje espiritual en específico.

Sin más que agregar, se despide de ustedes su amigo Alianza Naiguatá

¡Que Dios os bendiga hoy y siempre!


_________________
«Aparte del Espíritu protector ¿está unido un mal Espíritu a cada individuo, con miras a incitarlo al mal y darle ocasión de luchar entre el bien y el mal? 
- "Unido" no es la palabra exacta. Bien es verdad que los malos Espíritus tratan de desviar del camino recto al hombre cuando se les presenta la oportunidad: pero si uno de ellos se apega a un individuo, lo hace por determinación propia, porque espera que el hombre le haga caso. Entonces se desarrolla una lucha entre el bueno y el malo, y la victoria corresponderá a aquel cuyo dominio el individuo entregue»
Libro de los Espíritus, cuestión 511.