Muchas veces, quien llega en un Templo de Umbanda por primera vez viene lleno de recelo, lleno de miedo, temeroso de que esté haciendo algo errado o que alguien en aquel ambiente pueda perjudicarlo.
 
Las personas oyen las historias más absurdas sobre la Umbanda y no es por acaso, yo también ya oí historias absurdas de casos ocurridos dentro de un local que se identifica como Terreiro de Umbanda. Son historias de abuso, de asedio, de constreñimiento, de exposición al ridículo, de calumnia, difamación, mentiras, burlas, envidia, y toda suerte de ego, vanidad y otros desequilibrios que asolan al ser humano. No pocas veces oímos casos de dirigentes que usan del Templo, de un supuesto trabajo espiritual, para aprovecharse de las personas que llegan pidiendo ayuda, socorro, amparo espiritual y cura. Por conocer mucha gente, recibir mucha gente, acabo oyendo mucha cosa. Ya oí hasta historias de malversación, y no fueron una, ni dos y, sí, muchas. Es muy triste, casi que semanalmente, oímos nuevas historias de personas que procuraron un Templo de Umbanda y fueron mal recibidas, mal tratadas y hasta perjudicadas.
 
Para todos los casos de abuso, asedio, malversación y otros crímenes, yo recomiendo siempre que procure la Policía para hacer un boletín de Ocurrencia, para registrar el crimen y, si fuera el caso, tomar las providencias caviles.
 
Muchas veces, las personas son coacciones a mantenerse frecuentando un cierto local dicho religioso con la amenaza de que, de salir de aquel local, todo lo malo va a ocurrir en su vida. Y algunas veces los médiums de una corriente asisten a aquel que debería ser su Padre o su Madre Espiritual hablando mal de quien pidió para apartarse de los trabajos espirituales y, cuando no, todos testimonian el infeliz (o la infeliz) hacer trabajos negativos para perjudicar a aquellos que apenas escogieron no formar parte de su corriente mediúmnica. ¡Esto no es Umbanda!
 
Estas personas, que fueron perjudicadas, salen hablando mal de todo eso y ¡con razón! La única cosa que nos entristece es que todo eso en nada tiene que ver con la Umbanda y, sí, con la falta de preparación de algunas personas que están en nuestro medio (y no son pocas).
 
Sufrimos muchos tipos de discriminación, como, por ejemplo, de las nuevas religiones que predican ser las únicas electas y que nosotros trabajamos con demonios. Pero el peor preconcepto es de aquel que pasó por un local que le perjudicó, usando el nombre de Umbanda. Personas que se apasionaron por el Preto Velho [negro viejo], que se encantaron con las Crianzas [niños], que se fortalecieron con los Caboclos y que, en el mismo lugar donde conocieron estas entidades, fueron perjudicadas por el desequilibrio de un dirigente que debería estar allí para ayudar y orientar. ¿Cómo explicar que esto no es Umbanda?
 
Esto se vuelve un trauma en la vida de la persona y aquí vale la afirmación que dice: “gato escaldado tiene miedo de agua fría”. Es así para todos nosotros. Son millares de madres, padres, maridos y mujeres que temen por la integridad de sus parientes y amigos cuando oyen que ellos están frecuentando la Umbanda. Temen que ellos pasen por el mismo dolor, que ellos sientan el mismo miedo y que vivan con esta marca o esta “vergüenza” de haber participado de algo que no era bueno y no hacía el bien. ¡Y que fueron, sí, engañados con relación a la Umbanda!
 
Existe, sí, mucho umbandista, o mejor, personas que se dicen umbandistas y que usan de la Umbanda para SATISFACER SUS DESEQUILIBRIOS. ¡Esto no es Umbanda!
 
Es muy triste, porque, entorno, siempre hay mucha gente bien intencionada, gente que gusta de la Umbanda, gente que quiere hacer algo por el prójimo, gente que está allí creyendo en la caridad, ¡gente que está siendo engañada! ¡esto no es Umbanda!
 
Si usted frecuenta un local de estos, no tenga miedo, ¡apártese! ¡Si fuera preciso, de una disculpa y corte!  ¿tiene miedo! ¡Entonces no desista de la Umbanda, la Umbanda no tiene culpa de estos desequilibrios y de esta falta de preparación!
 
¡Umbanda es religión y hace única y exclusivamente el BIEN! ¡Umbanda no es para nuestro ego ni para nuestra vanidad! ¡Umbanda es para destruir nuestro ego, nuestra vanidad y ayudarnos a reequilibrarnos en la vida! ¡procure otro Templo donde usted sea bien acogido o bien acogida!
 
¡Procure un Templo donde exista AMOR! ¡procure un Templo donde las personas se respetan! ¡procure un Templo donde el encuentro espiritual sea más importante que el encuentro social! ¡encuentre un Templo que enseñe, que estudie, que esclarezca, que ampare, que oriente, que ayude, que no espere nada a cambio, más allá de su respeto por lo que es sagrado!
 
¡Esto es Umbanda! ¡la Umbanda es Sagrada! ¡la Umbanda es Religión y Espiritualidad! ¡la Umbanda es Fe y Caridad! ¡la Umbanda es Amor y Alegría! ¡la Umbanda es Conocimiento y Sabiduría! ¡la Umbanda es Justicia y Equilibrio! ¡la Umbanda es Ley y Orden! ¡la Umbanda es Evolución y Crecimiento! ¡la Umbanda es Vida para nuestras Vidas! ¡esto es Umbanda!
 
¡Procure y usted encontrará!

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«Aparte del Espíritu protector ¿está unido un mal Espíritu a cada individuo, con miras a incitarlo al mal y darle ocasión de luchar entre el bien y el mal? 
- "Unido" no es la palabra exacta. Bien es verdad que los malos Espíritus tratan de desviar del camino recto al hombre cuando se les presenta la oportunidad: pero si uno de ellos se apega a un individuo, lo hace por determinación propia, porque espera que el hombre le haga caso. Entonces se desarrolla una lucha entre el bueno y el malo, y la victoria corresponderá a aquel cuyo dominio el individuo entregue»
Libro de los Espíritus, cuestión 511.