Saludos mi estimado hermano;
Hermano, por lo general cuando uno piensa mucho en alguien es porque generalmente esa persona directa o indirectamente necesita de usted “algo”, eso por el lado espiritual; ahora bien usted afirma que le gusta mucho, por lo cual recuerda en su mente o subconsciente su nombre, ya que es como una unión sentimental que el mismo cerebro busca en el momento más tranquilo y relajado por tratarse de un sentimiento que usted siente hacia esa persona (existe un interés personal), la pregunta es ¿ella sentirá lo mismo por usted? O ¿existe reciprocidad?, ¿forma parte de su grupo espiritual?, las preguntas ocurren por la simple razón de que generalmente cuando hay alguien que gusta de otra persona dentro del mismo grupo de trabajo espiritual o caravana o no, es muy importante que exista el respeto y la debida canalización y concentración espiritual al igual que estando solos o con el resto del grupo, y es también muy importante que mientras este fumando cualquiera sea el fin, usted no debe ligar o confundir una cosa con la otra, (a menos que sea un trabajo o petición para esa misma persona la cual este pensando). La falta de atención y concentración en un trabajo espiritual u una sesión puede causar cambios o reacciones indirectamente a la persona que piensa en ese momento.
El poder de la mente es muy poderoso, ya que cuando nosotros concentramos nuestra mente a un hermano espiritual en medio de una sesión, es probable que ese hermano incorpore el espíritu a lo que llamamos (jalando con la mente el espíritu). Ello es tan poderoso cuando tenemos un tabaco, ya que este funciona como un conductor o comunicador entre el espíritu y tu mente como tal. En este caso pasa cuando llamamos el espíritu con la mente y el tabaco actúa como canalizador o activador.
No obstante cuando pensamos en una persona X, en el instante que estamos conjurando un tabaco, entonces el tabaco esta desviado a la persona que piensas inconscientemente “mucho cuidado con esto”, pues pasa por no mantener la mente en blanco y no concentrar los pensamientos al objetivo primario.
Recuerda que El amor es un sentimiento muy dulce y hermoso, pero es un sentimiento que debemos mantener dominado en cierto tiempo y espacio, es decir; debemos mantener el control mental de los sentimientos y no dejarnos llevar por ello en cualquier momento y en el sitio incorrecto, “todo tiene su tiempo hermano”; si no controlamos dichos sentimientos a la hora de hacer cualquier trabajo espiritual, entonces estaremos entorpeciendo dicha petición o trabajo espiritual y todo estará desviado a otro punto, que generalmente llevamos en nuestro subconsciente o en el pensamiento sin querer, resultando un choque (distorsión).
Cuando hacemos una petición de salud para una persona, por ejemplo tenemos que concentrarnos en esa persona, en su nombre en su necesidad y pensar en su bienestar y la petición camina de acuerdo a la dirección que nosotros mismo le demos a recorrer, así pasa con las peticiones de amor, unión, prosperidad, limpieza entre otras peticiones que incluyen la concentración del nombre de la persona y hasta su imagen en nuestras mentes.
Así, que hermano concentración en su trabajo espiritual, y no llame con la mente, ni con el tabaco al amor, porque el amor debe ser espontaneo y debe existir reciprocidad, de lo contrario agarre consejo y recuerde que no debe forzar al amor o a “x” persona que voltee a mirarlo porque el amor no se obliga y tampoco se trabaja con dominios; Ello debe venir sin ataduras.
Que Dios y la Madre Reina le bendiga.