SANTA BÁRBARA
Virgen y mártir
(+ 255)
Fue natural de Nicomedia e hija de Dióscoro, noble y rico, pero idólatra. No tenía más hija que Bárbara, en la que Dios había reunido admirables cualidades, entre ellas la de hacerla cristiana. Cuando Dióscoro lo supo arrojóse sobre ella cuál el lobo sobre la oveja, arrastróla por los cabellos y descargó sobre ella tan terribles golpes, que la dejó medio muerta. En esta disposición la presentó al presidente Marciano, quien, no pudiendo reducirla a la adoración de los falsos dioses, la hizo atormentar y encerrar después en la cárcel, donde la visitó su celestial Esposo Jesús, curándola instantáneamente todas sus heridas. Perdida por el presidente la esperanza de vencerla, la hizo azotar horriblemente, rasgar sus carnes con garfios, aplicarle hachas encendidas, golpear su cabeza con un martillo y cortar los pechos. Últimamente la hizo degollar, tomando su mismo padre el verdugo, el día 4 de Diciembre de 238, a los diez y ocho años de su edad. El Cielo envió un rayo que hizo perecer allí mismo a tan bárbaro padre.
Virgen y mártir
(+ 255)
Fue natural de Nicomedia e hija de Dióscoro, noble y rico, pero idólatra. No tenía más hija que Bárbara, en la que Dios había reunido admirables cualidades, entre ellas la de hacerla cristiana. Cuando Dióscoro lo supo arrojóse sobre ella cuál el lobo sobre la oveja, arrastróla por los cabellos y descargó sobre ella tan terribles golpes, que la dejó medio muerta. En esta disposición la presentó al presidente Marciano, quien, no pudiendo reducirla a la adoración de los falsos dioses, la hizo atormentar y encerrar después en la cárcel, donde la visitó su celestial Esposo Jesús, curándola instantáneamente todas sus heridas. Perdida por el presidente la esperanza de vencerla, la hizo azotar horriblemente, rasgar sus carnes con garfios, aplicarle hachas encendidas, golpear su cabeza con un martillo y cortar los pechos. Últimamente la hizo degollar, tomando su mismo padre el verdugo, el día 4 de Diciembre de 238, a los diez y ocho años de su edad. El Cielo envió un rayo que hizo perecer allí mismo a tan bárbaro padre.