Respondiendo a
@Congo nfinda, lo que sucedió a su amigo no es algo que todo el mundo vaya a compartir, de hecho, creo que la mayoría va a decir en primera instancia que es un Espíritu burlón o que es imposible que el Espíritu de un animal incorpore en una persona dando mil razones superficiales ajenas al Espiritismo en el contexto práctico. Yo tuve una experiencia en Umbanda en un ritual para la fecha de celebración de africanos y la entidad que oficiaba como jefe pidió a todos elegir un elemento de la naturaleza, yo elegí los animales mientras otros elegían árboles, viento, piedras, etcétera... el caso es que tan pronto inició el rito de golpe caí al suelo en posición cuadrúpeda y fui un tigre, fui un perro, fui un gato, fui un mono, una serpiente, un lobo, un rinoceronte, y no es nada que mientras yo era todo eso y percibía como un animal, otros me vieron como un animal con cada incorporación que tenía una tras otra. ¿Incorporé animales? ¡no! el Espiritismo cuando te explica las propiedades del periespíritu que es el cuerpo del Espíritu hay una que permite la personalización que implica adquirir la forma y rasgos psicológicos referentes a determinada idea, es decir, es normal que ocurra zoantropía que es como se llama a la capacidad de los Espíritus de volverse animales en su apariencia y comportarse como uno, sobretodo entre brujos. De hecho, un caso que conocí en el Centro Espirita fue el de una mujer que fue a asistencia porque en una habitación de su casa aparecía una pantera negra de dimensiones semejantes a un tigre y se iba haciendo más pequeña, la pantera resultó ser un Espíritu enamorado de ella y la forma adoptada se trató de una manera de divertirse por lo que sí es correcto decir que este tipo de cosas son realizadas por Espíritus frívolos (verifica la Escala Espirita sus características) o burlón, porque en cierto modo se burla y divierte al causar una impresión ante los presentes y un Espíritu en proceso evolutivo como animal no puede, por incompatibilidad de fluidos, incorporar a una persona por ende, son Espíritus quienes hacen esto.
Postdata: estos Espíritus, asociados a los elementos por los mitos y creencias, apoyados por supersticiones son útiles pese a que sean de esa naturaleza cuando son subordinados de un Espíritu de una jerarquía mayor. Cuando andan por su propia cuenta son fuente de travesuras y maldades, traen problemas y por eso son llamados de diablillos, duendes, sátiros y otras nomenclaturas.
Si usted quiere mi opinión aparte de la explicación yo le diría que tras suceder una incorporación animalesca yo pondría en duda la totalidad de las incorporaciones ya que la sola presencia de 1 solo Espíritu que se manifieste así ya pone en riesgo que todas las demás pudieran ser un teatro. Usted puede consultar sobre por qué ese Espíritu se presentó así y analizarlo muy bien para ver que la respuesta que le den ha sido correcta y no se trate de una ficción más que es muy común aunque se detecta poco. Yo no creo en centauros y minotauros, no creo en híbridos por su dudosa naturaleza.
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«Aparte del Espíritu protector ¿está unido un mal Espíritu a cada individuo, con miras a incitarlo al mal y darle ocasión de luchar entre el bien y el mal?
- "Unido" no es la palabra exacta. Bien es verdad que los malos Espíritus tratan de desviar del camino recto al hombre cuando se les presenta la oportunidad: pero si uno de ellos se apega a un individuo, lo hace por determinación propia, porque espera que el hombre le haga caso. Entonces se desarrolla una lucha entre el bueno y el malo, y la victoria corresponderá a aquel cuyo dominio el individuo entregue»
Libro de los Espíritus, cuestión 511.