Sistema de Adivinación Ifá
Según la tradición oral Yorùbá, Orí, la cabeza es una deidad, que podemos considerar como una entidad que es la conciencia.
Cada Orí en Ọ̀rún (el Cielo) delante de Olódùmarè (Ser Supremo), establece cual será su destino cuando encarne en Ayé (la Tierra) ese proceso de acuerdo es presenciado por Òrìṣà Ọ̀rúnmìlà. En el proceso de descenso a la Tierra (encarnación) Orí olvida su destino y para recordarlo debe ir con los sacerdotes de Ọ̀rúnmìlà.
Òrìṣà Ọ̀rúnmìlà es tan importante que todas las personas pueden y deben venerarlo pues es el guía principal para el cumplimiento del destino, el objeto sagrado que representa a Ọ̀rúnmìlà esta formado por dieciséis semillas de Ọ̀pẹ, la palma africana (Elaeis Guineensis), llamadas Ikin; cada Ikin debe tener cuatro o más orificios, llamados ojos o bocas. A este conjunto de semillas se le llama Ọwọ-Ifá Mano de Ifá.
Òrìṣà Ọ̀rúnmìlà presencia todos los destinos acordados en Ọ̀rún, por eso es llamado Ẹlẹ́ẹ̀rí Ìpín, Testigo del Destino. A diferencia de los demás Òrìṣà no toma posesión de ningún Ẹlẹ́gùn (médium) por eso su sabiduría la trasmite a través del Sistema de Adivinación Ifá. Ifá también es otro nombre para Ọ̀rúnmìlà.
Este sistema de adivinación se basa en 16 figuras de cuatro niveles que al duplicarse son llamadas Ojú Odù y al combinarse forman otras 240 figuras llamadas Ọmọ Odù para un total de 256 figuras que pueden ser llamadas Odùfá.
Estas 256 pueden obtenerse de dos maneras:
- Usando una Ọwọ-Ifá, 16 semillas de palma africana
- Usando Ọ̀pẹ̀lẹ̀ una cadena con ocho eslabones que pueden caer cara arriba o cara abajo. Originalmente los eslabones son partes de las vainas del árbol Ọ̀pẹ̀lẹ̀ Schrebera Arborea.
Cada una de los Odùfá contiene predicciones, consejos, versos, encantamientos, tabúes y ofrendas, que sirven para orientar la vida de una persona. También cada uno de ellos indica la importancia de rendir culto a algunos Òrìṣà.
A cada recién nacido se le lleva con el Babaláwo, Sacerdote de Ọ̀rúnmìlà para hacer Dáfá, es decir, consultar a Ifá sobre el destino del bebe, así los padres podrán educarlo correctamente y ayudaran a cumplir su destino.
En una ceremonia llamada Iṣefá una persona es admitida como devota de Ọ̀rúnmìlà, en ella recibe Ọwọ-Ifá, así podrá venerar a este gran Òrìṣà. Durante la ceremonia el Babaláwo que la dirige hace Dáfá y a través del Odùfá marcado se indica a la persona en cuales cultos de Òrìṣà debe iniciarse y de cuales debe recibir objetos sagrados para veneración.
Así por ejemplo, a un hombre se le puede indicar que para el cumplimiento de su destino debe consagrarse en los cultos de Ifá, Ọbàtálá y deberá adorar a Eégún, Èṣù y Ògún. El Odùfá deja en claro que su Orí estableció recibir la ayuda de todas estas deidades.
La sabiduría de Ifá enseña que no todos los Òrìṣà van a ayudarnos en el cumplimiento de nuestro destino, es por eso que una persona puede pasar la vida entera orando a una deidad que no responderá a sus súplicas no por falta de compasión, sino por no haber recibido de Olódùmarè la orden de velar por ella.
Es importante dejar claro que solo Ọ̀rúnmìlà está capacitado para indicar las deidades a rendir culto, ningún otro Òrìṣà cumple con esa tarea, tampoco los Ancestros cumplen esa tarea, ni ningún otro tipo de ser espiritual.
Es también importante dejar claro que el Odùfá de Iṣefá no representa el destino de la persona, solo es una guía.
Vale aquí también dejar claro que los dieciséis Ojú Odù son dieciséis sacerdotes que son los compañeros de Ọ̀rúnmìlà, son deidades al igual que sus 240 ọmọ, niños.
Los nombres de los Ojú Odù son:
Ogbè Méjì, Ọ̀yẹ̀kú Méjì, Ìwòrì Méjì, Òdí Méjì,
Ìrosùn Méjì, Ọ̀wọ́nrín Méjì, Ọ̀sá Méjì, Ọ̀bàrà Méjì,
Ọ̀kànràn Méjì, Ògúndá Méjì, Ìká Méjì, Òtúrúpọ̀n Méjì
Òtúrá Méjì, Ìrẹtẹ̀ Méjì, Ọ̀ṣẹ́ Méjì, Òfún Méjì
Los nombres de los 240 Odù son llamados con la combinación de los nombres de los dos Ojú Odù que los forman, por ejemplo:
O O
I O
O O
O O
Ọ̀yẹ̀kú-Ìká, apodado Ọ̀yẹ̀kúbìká
I O
I I
I I
O O
Ìwòrì-Ògúndá, apodado Ìwòríwòndá
Muchas Felicidades
_________________
"La parte más útil del aprendizaje es desaprender lo que es falso."
Antístenes.
Según la tradición oral Yorùbá, Orí, la cabeza es una deidad, que podemos considerar como una entidad que es la conciencia.
Cada Orí en Ọ̀rún (el Cielo) delante de Olódùmarè (Ser Supremo), establece cual será su destino cuando encarne en Ayé (la Tierra) ese proceso de acuerdo es presenciado por Òrìṣà Ọ̀rúnmìlà. En el proceso de descenso a la Tierra (encarnación) Orí olvida su destino y para recordarlo debe ir con los sacerdotes de Ọ̀rúnmìlà.
Òrìṣà Ọ̀rúnmìlà es tan importante que todas las personas pueden y deben venerarlo pues es el guía principal para el cumplimiento del destino, el objeto sagrado que representa a Ọ̀rúnmìlà esta formado por dieciséis semillas de Ọ̀pẹ, la palma africana (Elaeis Guineensis), llamadas Ikin; cada Ikin debe tener cuatro o más orificios, llamados ojos o bocas. A este conjunto de semillas se le llama Ọwọ-Ifá Mano de Ifá.
Òrìṣà Ọ̀rúnmìlà presencia todos los destinos acordados en Ọ̀rún, por eso es llamado Ẹlẹ́ẹ̀rí Ìpín, Testigo del Destino. A diferencia de los demás Òrìṣà no toma posesión de ningún Ẹlẹ́gùn (médium) por eso su sabiduría la trasmite a través del Sistema de Adivinación Ifá. Ifá también es otro nombre para Ọ̀rúnmìlà.
Este sistema de adivinación se basa en 16 figuras de cuatro niveles que al duplicarse son llamadas Ojú Odù y al combinarse forman otras 240 figuras llamadas Ọmọ Odù para un total de 256 figuras que pueden ser llamadas Odùfá.
Estas 256 pueden obtenerse de dos maneras:
- Usando una Ọwọ-Ifá, 16 semillas de palma africana
- Usando Ọ̀pẹ̀lẹ̀ una cadena con ocho eslabones que pueden caer cara arriba o cara abajo. Originalmente los eslabones son partes de las vainas del árbol Ọ̀pẹ̀lẹ̀ Schrebera Arborea.
Cada una de los Odùfá contiene predicciones, consejos, versos, encantamientos, tabúes y ofrendas, que sirven para orientar la vida de una persona. También cada uno de ellos indica la importancia de rendir culto a algunos Òrìṣà.
A cada recién nacido se le lleva con el Babaláwo, Sacerdote de Ọ̀rúnmìlà para hacer Dáfá, es decir, consultar a Ifá sobre el destino del bebe, así los padres podrán educarlo correctamente y ayudaran a cumplir su destino.
En una ceremonia llamada Iṣefá una persona es admitida como devota de Ọ̀rúnmìlà, en ella recibe Ọwọ-Ifá, así podrá venerar a este gran Òrìṣà. Durante la ceremonia el Babaláwo que la dirige hace Dáfá y a través del Odùfá marcado se indica a la persona en cuales cultos de Òrìṣà debe iniciarse y de cuales debe recibir objetos sagrados para veneración.
Así por ejemplo, a un hombre se le puede indicar que para el cumplimiento de su destino debe consagrarse en los cultos de Ifá, Ọbàtálá y deberá adorar a Eégún, Èṣù y Ògún. El Odùfá deja en claro que su Orí estableció recibir la ayuda de todas estas deidades.
La sabiduría de Ifá enseña que no todos los Òrìṣà van a ayudarnos en el cumplimiento de nuestro destino, es por eso que una persona puede pasar la vida entera orando a una deidad que no responderá a sus súplicas no por falta de compasión, sino por no haber recibido de Olódùmarè la orden de velar por ella.
Es importante dejar claro que solo Ọ̀rúnmìlà está capacitado para indicar las deidades a rendir culto, ningún otro Òrìṣà cumple con esa tarea, tampoco los Ancestros cumplen esa tarea, ni ningún otro tipo de ser espiritual.
Es también importante dejar claro que el Odùfá de Iṣefá no representa el destino de la persona, solo es una guía.
Vale aquí también dejar claro que los dieciséis Ojú Odù son dieciséis sacerdotes que son los compañeros de Ọ̀rúnmìlà, son deidades al igual que sus 240 ọmọ, niños.
Los nombres de los Ojú Odù son:
Ogbè Méjì, Ọ̀yẹ̀kú Méjì, Ìwòrì Méjì, Òdí Méjì,
Ìrosùn Méjì, Ọ̀wọ́nrín Méjì, Ọ̀sá Méjì, Ọ̀bàrà Méjì,
Ọ̀kànràn Méjì, Ògúndá Méjì, Ìká Méjì, Òtúrúpọ̀n Méjì
Òtúrá Méjì, Ìrẹtẹ̀ Méjì, Ọ̀ṣẹ́ Méjì, Òfún Méjì
Los nombres de los 240 Odù son llamados con la combinación de los nombres de los dos Ojú Odù que los forman, por ejemplo:
O O
I O
O O
O O
Ọ̀yẹ̀kú-Ìká, apodado Ọ̀yẹ̀kúbìká
I O
I I
I I
O O
Ìwòrì-Ògúndá, apodado Ìwòríwòndá
Muchas Felicidades
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"La parte más útil del aprendizaje es desaprender lo que es falso."
Antístenes.