Aspectos sobre mediumnidad

Pregunta: ¿Qué es la mediumnidad?
Ramatís.– Es el puente entre el mundo material y el espiritual, no el "oculto" como muchos dicen o creen. Nuestra comunicación es a través de estos hermanos, denominados médiums o caballos, comunicación que partiendo de una misma raíz se expresa de distintas formas: parlantes, auditivos, videntes, de intuición, escritura automática o escritura extrasensorial, como en este momento está ocurriendo. Digamos, que sucede como la energía eléctrica que pone en funcionamiento todo un cúmulo de motores, en las tecnologías de vuestro mundo.
Pregunta: ¿Cómo se presenta o manifiesta la mediumnidad en la persona?
Ramatís.– Desarrollando algunas de las facetas que he contestado en vuestra primera pregunta, y aprovecho a la vez para hacer una aclaración sobre los que practican la sublimidad de la poesía, los no profesionales de esta forma de escribir, sino los que la aceptan como un regalo del Cielo. El profesional, siempre se esclaviza pensando que todo es dado por él mismo y debido a su tesón en el trabajo.
No, amados hermanos, la inspiración viene de vuestro exterior, fuera de vuestro hábitat, los que así no piensan están totalmente confundidos y para aclarar algunas situaciones diré que la inspiración divina y de alta espiritualidad viene de la luz, y toda escritura repugnante, viciada y confusa, viene de las tinieblas donde habitan los Espíritus bajos y sin luz.
El hombre siempre da de aquello que se alimenta y para aclarar más en profundidad la pregunta diré, que ya desde niños, la mediumnidad se presenta por medio de visiones, levitaciones, estigmatizaciones, y no ha sido el primer niño que poniendo su mano sobre un enfermo ha sido aliviada su enfermedad.
Pregunta: ¿La mediumnidad, es un don divino que el Espíritu adquiere cuando ha llegado al grado de madurez suficiente para poseerla?
Ramatís.– La persona que posee la mediumnidad, no logra saberlo hasta que se hacen en ella las primeras manifestaciones, las cuales no siempre son aceptadas; en la mayoría hay un rechazo hacia ellas, acumulando muchas veces una larga cadena de no aceptación.
Las consecuencias a nivel físico también son terribles, llegando incluso a terminar sus días en la triste habitación de un psiquiátrico. De hecho, su Espíritu ya baja a la carne aceptando tal compromiso.
Pregunta: ¿Cuándo es el momento propicio para su desarrollo, cuando hace su aparición o cuando se crea conveniente?
Ramatís.– El hortelano prepara y abona la tierra, siembra su futura cosecha y espera el momento de la recogida, nunca será antes ni después, puesto que no aprovecharía el fruto, perdiendo inútilmente su trabajo.
El que posee la mediumnidad debe saber aprovecharse de ella y en su desarrollo ir adquiriendo experiencia, apartando de él todo lo que le perturbe o suponga contrariedad para su hermosa labor. Su experiencia le dará responsabilidad y ése es el momento.
Pregunta: ¿Puede cualquier Espíritu que ya ha dejado la materia y no fue médium en esa existencia, bajar en la próxima con ese compromiso adquirido?
Ramatís.– La mediumnidad no se elabora en el Astral como el artista trabaja en la arcilla para modelar y hacer de la nada algo que parece tener vida. El Espíritu elabora su progreso en el dolor y el sufrimiento, llegando a purificarse de tal manera que puede recibir a través del cuerpo que lo posee, los más altos entes espirituales que pueblan el Astral.
Pregunta: A los médiums se les define como cuerpos abiertos hacia el Astral, ¿quieres enunciarnos sus distintas características?
Ramatís.– Nunca son iguales las características de un médium a otro, puesto que la conexión Astral-médium y médium-Astral varía según el grado de conocimiento, aceptación, entrega a los demás y desarrollo del buen hacer. Las características de una mediumnidad desarrollada por completo son la visualización, la voz parlante y la variación de voces, estigmatizaciones, levitación, transportes, bilocación, adivinación y transmisión del pensamiento. Aunque, estas dos últimas se adquieren más por el desarrollo de algunas facultades de la mente que de los valores del Espíritu.
Pregunta: ¿Por qué unos médiums son posesionados por Espíritus de Luz y otros lo son por Espíritus de las tinieblas?
Ramatís.– Lógicamente, hermanos, cuando el médium se sublimiza con su labor, alcanza cada día más el Astral de la Luz, mientras que los médiums que se dedican a poner precio y comercializar su labor, se hacen esclavos del mundo y de los Espíritus del bajo astral. Estos son los verdaderos enemigos de los buenos obreros del Señor.
Pregunta: ¿Cómo podemos diferenciar a un médium verdadero y honesto de otro que sea falso?
Ramatís.– Fácilmente, cuando se vive en la plenitud del Espiritismo y se alimenta de sus hermosos y sabios mensajes. El Espíritu os pone un pequeño ejemplo: fácilmente encontraréis espiritistas o médiums que se rodean de misterio y son acérrimos idólatras de estampitas, imágenes, luces de aceite y se autodefinen como "enviados de los últimos tiempos". Esos son los falsos, puesto que el verdadero espiritista sólo se alimenta de Dios y vive de su grandeza, desechando toda idolatría. Jamás se os ocurriría tirar a la basura una joya y guardar el estuche.
Ellos son fáciles al mundo que vive la idolatría. También es por eso que el verdadero médium no entra en esos juegos del mundo y sólo conectan con ellos una minoría, ya que desgraciadamente el mundo vive de romerías, milagros inexistentes y fáciles alucinaciones de misterio.
Pregunta: La persona que consciente de su mediumnidad la rechaza, ¿puede crearle inestabilidad o desequilibrios físicos en el transcurso de su vida? ¿Es grave la deuda contraída a nivel espiritual?
Ramatís.– Toda persona que conscientemente la rechaza, es una persona enferma durante toda su vida mentalmente, no encontrando estabilidad ni paz en su Espíritu. Es semejante a una olla a presión cuya válvula ha sido obstruida. La sensación de estos hermanos es la de que van a estallar de un momento a otro, debido a la energía acumulada.
Repito nuevamente aquí, que la deuda contraída a nivel espiritual es labor de los mentores encargados, ya que se cuestionan distintos hechos de unos casos a otros.
Pregunta: ¿Por qué los médiums mediocres por su falta de entrega, envidian a otros consolidados e intachables que han renunciado a todo para perfeccionar su facultad?
Ramatís.– La vagancia en la hermosa labor mediúmnica es la catástrofe más terrible para el Espíritu de una mediumnidad. Normalmente, quien así actúa se cree autosuficiente con saber que es reconocido o reconocida como médium, y naturalmente cuando alguien se hace responsable de su mediumnidad y marcha sin salirse del camino que le ha sido impuesto, provoca en los otros la envidia -tan característica en vuestro mundo-, terminándose de destruir, puesto que el Espíritu se sublimiza con el Amor y se retrasa con el odio.
Pregunta: ¿Puede una mediumnidad progresar más rápidamente limpiando de su vida todo aquello que le perturbe, incluida la familia consanguinea?
Ramatís.– Si tratáis de arrastrar una enorme piedra tal como esta, aparte de la fatiga que supone arrastrarla, apenas se movería; pero si la colocáis sobre ruedas, fácilmente la conduciréis a donde queráis.
La familia consanguinea, cuando es un acicate y ayuda para el médium, o simplemente para el practicante del Espiritismo, forma un entorno sublimado. En caso contrario puede producir un desajuste total. Es hora pues de que vuestra humanidad sepa que también se debe a la Familia Universal, pues estar al margen de ésta por complacer sólo a la suya es el mayor error, que a veces cuesta siglos de reencarnaciones para saldar la deuda.
Pregunta: ¿Qué preparación ha de tener en el espacio un ser ante su bajada a la Tierra para poner su cuerpo al servicio del Espíritu?
Ramatís.– La preparación va implícita en su propio desarrollo, y como una mediumnidad tiene forzosamente que cumplir un cometido y hasta no cumplir su compromiso no podrá dejar la misión que él mismo eligió; cuando regresa al espacio y su cometido no ha sido el adecuado, los propios mentores le acompañan a presenciar sesiones mediúmnicas con el fin de que pueda directamente ver en Espíritu, cuáles son los defectos y virtudes de una mediumnidad, comprendiendo rápidamente cuáles son propiamente los suyos.
Pregunta: Una mediumnidad que baja a la carne con una importante misión evangelizadora, en la que vuelca toda su fuerza y sabiduría, pero que por causas ajenas a él esa misión no se realiza, o no en toda su plenitud; ¿qué tipo de perjuicio le puede traer una vez desencarnado, si él ha puesto todo de su parte?
Ramatís.– Se os ha dicho en varias respuestas a vuestras preguntas que nunca paga un Espíritu la culpabilidad de otros. En algo tan esencial, tienen que verse el equilibrio y la justicia de Dios.
Si por ejemplo, la misión no ha sido llevada hasta el final de una existencia, o en su caso, mal llevada, esa culpabilidad kármica será por entero del médium. Pero si ese desarrollo mediúmnico no alcanza su plenitud final por la intervención con desconocimiento de unos ciertos hermanos, éstos contraerán un débito doble, por el mal uso que ellos han hecho de dicha sabiduría, más el daño espiritual que puedan haber causado en la estabilidad del médium. Dejamos bien claro que, pese a éstas desestabilizaciones, una mediumnidad, jamás puede abandonarse.
Pregunta: La mediumnidad que para obtener riquezas y posiciones materiales se convierte en aliada del mal, ¿se encadena peligrosamente a las entidades diabólicas?
Ramatís.– Rompen, naturalmente, la fuente de la que se nutren del bien, para incorporarse a las tinieblas de las que se alimentan los seres afines al mal; lo que comporta una grave responsabilidad. Tardará múltiples existencias, puesto que es un daño importante para su Espíritu, pero al final regresará a la Luz.
Pregunta: ¿Cuando un médium emplea su facultad sólo en sesiones con personas de su agrado, además de ir en contra de lo sagrado, cabe la posibilidad de fraude o engaño?
Ramatís.– Cuando un médium recurre a este cómodo servicio, no por eso va en contra de lo sagrado, sino en contra de las leyes por las que se rige una mediumnidad. El engaño o fraude puede realizarse entre cuatro personas o en un estadio con veinte mil. Ahora bien, aquél que viva en la Verdad, difícilmente será engañado.
Pregunta: ¿Existen algunas características o rasgos físicos que puedan identificar a un médium, respecto a su elevación más o menos espiritual?
Ramatís.– El médium es una persona como otra cualquiera respecto a lo físico y por un determinado rasgo o característica no puede identificarse una mediumnidad. Ahora, eso sí, toda influencia que entre en él le hará ser cambiante con bastante asiduidad; como también el dolor, las catástrofes, etc. Es un potente radar que capta muchas cosas y por necesidad, hay días que está radiante de felicidad, otros con gestos de dolor, aparentemente más o menos envejecido unos días y más saludable y joven de aspecto otros. Respecto a su elevación, recordad la frase de Jesús, "Por sus obras los conoceréis".
Pregunta: ¿Qué son y por qué se producen las estigmatizaciones?
Ramatís.– Las estigmatizaciones son signos de desgarros o punciones, que aparecen en manos, pies, espalda y frente, no siempre en todos los sitios a la vez, ni en todos los médiums tampoco.
Unas veces son debidas al grado sublime del momento mediúmnico y a la entidad que entra en él. Y otras, debido al sufrimiento que causa en él, una entidad del bajo astral en su acoplamiento.
Una nueva ocasión que aprovecha este vuestro Hermano en Espíritu para pediros una profunda reflexión de cuanto habéis recibido, sobre todo para aquellos que despiertan en cualquiera de las facetas que componen la mediumnidad.

Vuestro Hermano Ramatís.