EL PAYÉ DEL SANTO
El amuleto de San La Muerte es un eficaz “payé” (amuleto talismán). El pueblo lo nombro su “abogado” saben que portando el “Payé” colgado del cuello con una cadena o cordón de cobre; teniendo a la imagen en su casa, o incrustándoselo en el bíceps, están seguros de todo mal.
Hay Personas que hacen rasgar la piel del brazo a la altura del bíceps, para incrustarse en el amuleto de San La Muerte hecho en un tamaño de pequeñas proporciones.
La confección del amuleto requiere varios requisitos según el “tallador” que lo realice y el lugar de su devoción, porque varía su forma de consagrarlo. Los materiales que utilizaban los indios Tupí Guaraní, era de madera blanda que abunda en la zona como ser naranjo, palo santo o de “curupí”. Algunas veces se realizaba la imagen de un plomo derretido de una bala extraída a “punta de facón” de una persona que haya sido asesinada, otras veces lo hacen de plomo simplemente; también se realiza en arcilla que es cocinada en Viernes Santo; según dicen los mas poderosos por su fuerza milagrosa es la que se hace con huesos humanos, especialmente de los huesos que conforman las falanges, antiguamente eran de especial predilección por los devotos del Santito, hacer el amuleto-payé de una falange de un niño que hubiese fallecido y que este haya sido bautizado.
A pesar que la industria haya sobrepasado el trabajo que realizaban los artesanos talladores de imágenes, todavía se puede encontrar a alguien que se dedique a realizar esas hermosas imágenes talladas que cada artista de impregna su estilo particular. El artesano o tallista deberá ser consagrado a San La Muerte.
La medida de esta tallas nunca deben llegar a medir los 10 cm de altura. Para ser más efectivo su efecto son las más poderosas las realizadas en Vienes Santo, antiguamente cuenta los lugareños, la imagen debía ser escondida una noche en el altar de la una iglesia católica, en ese entonces ubicada entre Saladas y San Roque, para esto el gaucho debía forzar la entrada de la iglesia para depositar el amuleto-payé en el altar y luego para retirarlo, el mismo quedaba con todo su poder una vez que el sacerdote cristiano, oficializaba misa y bendecía la Santa Hostia.
Como no se podía realizar la aventura contada anteriormente, los que deseaban el talismán, escandían la pequeña imagen en velas ahuecadas para que recibiera la bendición 7 veces, cada una en una iglesia distinta.
La imagen puede ser de varias formas distinta. Están las que tienen al “Santito Esqueleto” en posición fetal; en otras se encuentra sentado con la barbilla apoyada en las manos y los codos apoyados en las rodillas, parecidas a la estatua del Pensador de Rodin, con una guadaña a su espalda; también está la que es solo un esqueleto con una guadaña en su costado derecho (si está en el lado izquierdo es igual) otras veces esta el esqueleto con una capa, esta puede ser de color negro, blanco o rojo.
La imagen en la que San La Muerte se encuentra parado, esta sincretizada con la Parca grecorromana que los Jesuitas y Franciscanos se encargaron de traer de Europa, lo mismo que la guadaña es un elemento de Parca, y se comenzó a utilizar este elemento a partir del siglo XVI o XVII.
Antiguamente la imagen del Santito era en posición fetal o bien en posición de sentado. Luego se le agregó la guadaña y cuando es representado por el Señor de la humildad y de la Paciencia, tiene un balde donde, dicen algunos cultores del Santito se encuentra la fuerza de sus milagros, otros dicen que en balde se encuentra el agua para curar las personas enfermas de cuerpo y de espíritu.
Otra imagen del “Esqueleto” es en posición sentada en un trono con la guadaña a su lado. Cuentan los lugareños de la zona de Mercedes (Corrientes) y otros pagos cercanos, que el Gaucho Antonio Gil era devoto de San La Muerte. En el momento que una “partida” lo capturó y luego lo mató, éste tenia colgado de su cuello una cadena de cobre con el poderoso amuleto.
Atte. Mago Blanco
Argentina
Última edición por MagoBlanco el Jue Dic 05, 2013 8:13 am, editado 1 vez