Cuentan nuestros más viejos relatores de los Andes Venezolanos que en la Sierra Nevada de los Andes habitaba la princesa Tibisay con su tribu. A pesar de las constantes guerra entre varias tribus, Tibisay era considerada como una india de espíritu alto, valiente y de corazón puro y alegre. Ella se decía siempre a si misma: “Si no disfruto de la bendición que me da la naturaleza y se la agradezco a mi montana;se va a entristecer”
En cierto tiempo se dio una gran batalla, y hubo muchos heridos en su tribu. Casi todos los habitantes estaban en riesgo de desfallecer. Sin embargo a pesar de su tristeza, Tibisay siempre escuchaba la voz del viento, y una noche escucho su voz que le decía: - No desfallezcas, las aguas mágicas de la laguna de Mucubaji pueden curar a los tuyos-. Pero amigo Viento, donde se encuentra esa laguna. A lo cual el viento le contesto: - A tres días de tu tierra se encuentra esa maravillosa laguna. Pero ten cuidado, el fuego eterno querrá impedírtelo así es mejor que disfraces de un animal para que pases desapercibida_
Así que la india Tibisay invoco un conjuro con ayuda de su montaňa y se convirtió en una hermosa águila blanca. Tibisay se preguntaba a si misma: “¿Que será ese fuego eterno, del cual me tengo que esconder?” El viento escucho su preocupación. Y le respondió: _Es el odio y la sed de conquista del hombre, y tu debes luchar contra el para traer paz a tu pueblo_.
Así que la India Tibisay voló, voló y voló hasta llegar una hermosa laguna. Realmente tenía tan singular hermosura que se sentía la gran magia que existía en ella. – ¿Y ahora que? ¿Cómo ayudare a mi pueblo?_ Sintió otra vez el susurro del viento que le decía, _bebe un poco de su agua y dirigite a las nubes mas cargadas de agua y estas se encargaran de salvar a tu pueblo con esta agua bendita. Sin embargo todo esto tendrá un precio. No podrás volver a ser humana._ Le dijo el viento. Tibisay se entristeció profundamente ya que no volvería a ver a su pueblo y a las personas que amaba. Pero escucho a su corazón, tomo un poco del agua de la laguna y se voló a grandes alturas hasta la nube mas cargadas de agua. El viento, que era también de buen corazón, empujo con fuerza la nube hasta donde habitaba la tribu de Tibisay. Y un buen día cayó un gran chaparrón, y gracias a esas gotas de lluvia muchos indios se curaron, y pudieron emprender una nueva vida. Por eso se dice que siempre cerca de la Sierra Nevada vuela una águila blanca, y algunos de los indios mas sabios de la tribu aseguran que es la India Tibisay que los protege al recorrer los andes venezolanos.
: En cierto tiempo se dio una gran batalla, y hubo muchos heridos en su tribu. Casi todos los habitantes estaban en riesgo de desfallecer. Sin embargo a pesar de su tristeza, Tibisay siempre escuchaba la voz del viento, y una noche escucho su voz que le decía: - No desfallezcas, las aguas mágicas de la laguna de Mucubaji pueden curar a los tuyos-. Pero amigo Viento, donde se encuentra esa laguna. A lo cual el viento le contesto: - A tres días de tu tierra se encuentra esa maravillosa laguna. Pero ten cuidado, el fuego eterno querrá impedírtelo así es mejor que disfraces de un animal para que pases desapercibida_
Así que la india Tibisay invoco un conjuro con ayuda de su montaňa y se convirtió en una hermosa águila blanca. Tibisay se preguntaba a si misma: “¿Que será ese fuego eterno, del cual me tengo que esconder?” El viento escucho su preocupación. Y le respondió: _Es el odio y la sed de conquista del hombre, y tu debes luchar contra el para traer paz a tu pueblo_.
Así que la India Tibisay voló, voló y voló hasta llegar una hermosa laguna. Realmente tenía tan singular hermosura que se sentía la gran magia que existía en ella. – ¿Y ahora que? ¿Cómo ayudare a mi pueblo?_ Sintió otra vez el susurro del viento que le decía, _bebe un poco de su agua y dirigite a las nubes mas cargadas de agua y estas se encargaran de salvar a tu pueblo con esta agua bendita. Sin embargo todo esto tendrá un precio. No podrás volver a ser humana._ Le dijo el viento. Tibisay se entristeció profundamente ya que no volvería a ver a su pueblo y a las personas que amaba. Pero escucho a su corazón, tomo un poco del agua de la laguna y se voló a grandes alturas hasta la nube mas cargadas de agua. El viento, que era también de buen corazón, empujo con fuerza la nube hasta donde habitaba la tribu de Tibisay. Y un buen día cayó un gran chaparrón, y gracias a esas gotas de lluvia muchos indios se curaron, y pudieron emprender una nueva vida. Por eso se dice que siempre cerca de la Sierra Nevada vuela una águila blanca, y algunos de los indios mas sabios de la tribu aseguran que es la India Tibisay que los protege al recorrer los andes venezolanos.
que la reina los protega