JUICIO FINAL:

Las religiones pronostican el fin del mundo, hablan del Juicio Final; pero nosotros conocemos la Verdad que nos hace libres y decimos: No habrá ningún fin del mundo ni tampoco se manifestará el Juicio Final en la forma como los dogmas lo expresan, porque se trata de una gran transmutación que se está efectuando actualmente en toda la Tierra. Esto resulta necesario por el mal uso del libre albedrío y la errada canalización de la energía en todos los aspectos del común vivir lo cual ha deteriorado al mundo, morada espacial para esta humanidad. El planeta atraviesa ahora por una etapa de caos y confusión, debido a la degeneración moral y pérdida de valores que se está manifestando.

Como termina el Gran Ciclo evolutivo, hace falta un cambio a fondo. Al haberse perdido el control, ya el cambio no puede efectuarse desde el plano humano por las buenas pues se acabó el tiempo; por lo tanto, hay que abrir paso a lo nuevo para bien y victoria. Es preciso separar la buena semilla de la mala, limpiar el campo, arrancar la cizaña definitivamente para que el planeta, al quitarse de encima la tremenda carga negativa que lo abruma, enderece su eje, limpie su atmósfera, purifique los reinos de la Naturaleza, cambie la vida de la gente en paz, belleza y armonía.

Una gran batalla está por darse entre las fuerzas del bien y del mal, con violencia y confrontación armada a nivel físico. Las legiones de luz concentrarán sus esfuerzos en unión con el Latido Universal, para irradiar todo el poder del Séptimo Rayo en acción. Entonces, las legiones del mal y los servidores de las tinieblas serán vencidos para siempre. Magos negros, egrégores de la efluvia, todo eso perderá su poder definitivamente por el triunfo de la Luz y de sus servidores, porque la Luz de Dios nunca falla.

Los rezagados serán llevados a otros planetas afines a su nivel evolutivo. Los seres perversos, culpables de la degeneración que hay en el mundo, serán reducidos a chispas divinas porque la Justicia Divina entrará en acción inexorable, después que tanto tiempo se dio al Amor para redimir, en la oportunidad de reencarnaciones sucesivas. Cataclismos geológicos causarán desolación.

Cuando termine la Gran Transmutación que ponga todo en orden, vendrá la Quinta Edad Dorada (Era de Capricornio) que sucederá a la Era de Acuario actual. La vida cambiará en armonía y belleza para quienes queden en esta morada espacial ya regenerada, pura y limpia. La gran transmutación la estamos viviendo, pero el final no ha llegado. Que no haya ningún temor en las consciencias pues se trata de un cambio glorioso para bien y en Orden Divino. Sabemos que todo sucede siempre por mejor y todo está en Orden Divino. La Quinta edad Dorada llegará a su debido tiempo y eso está por ver en la próxima Era de Capricornio.

Amado Maestro Lanto