Mucho se ha hablado de la telepatía, comunicación a distancia sin un canal físico reconocible pero con la posibilidad de recibir y transmitir información solo con la mente. Coseguí este artículo, como siempre son bienvenidos sus comentarios y experiencias al respecto....
La telepatía (del griego τηλε tēle, «lejos» y πάθεια pátheia, «sentimiento») consiste en la transferencia de pensamientos o sentimientos entre individuos a través de la mente, sin el uso de los cinco sentidos. Es considerada como una forma de percepción extrasensorial o cognición anómala. La telepatía se relaciona a menudo con diversos fenómenos paranormales como la precognición y la clarividencia.
Aunque se han llevado a cabo muchos experimentos sobre la telepatía, su existencia no es aceptada por la gran mayoría de la comunidad científica, entre otras cosas, argumentando que las magnitudes de energía que el cerebro humano es capaz de producir resultan insuficientes para permitir la transmisión de información. No obstante, algunos investigadores señalan que, con la tecnología necesaria, en un futuro será posible interpretar las ondas cerebrales mediante algún dispositivo y enviar mensajes textuales a un receptor de manera inalámbrica
Tiene que ver con la transmisión de pensamientos a través de la mente -como la mente es tan poderosa- podemos afirmar que desarrollar poderes telepáticos es relativamente sencillo siempre y cuando nos ejercitemos constantemente.
Desde luego, a algunas personas les resultará más sencillo, pues su mente se encuentra más abierta y más dispuesta a enviar señales; a su vez, si la persona con la cual intentamos entablar comunicación telepática está sensibilizada para estos ejercicios, será más rápida la comunicación mental.
LOGRARLO A TRAVÉS DE LA PRÁCTICA
El primer ejercicio es tal vez el más difícil y es relajarse. Hay que buscar un lugar cómodo y sereno; aquietar la mente, llevarla a un páramo de paz y tranquilidad. Hay que lograr llevar toda nuestra energía al plexo solar. Una vez dominada la relajación y pudiéndola adquirir en cualquier entorno y situación estaremos listos para la comunicación a distancia.
El siguiente ejercicio es también individual y se puede realizar en cualquier momento. Cuando vayamos caminando por la calle, o en una fila o en cualquier otra situación que tengamos alguien delante de nosotros, nos concentraremos en esa persona y le transmitiremos el siguiente pensamiento: “Te estoy llamando, date vuelta”. Probablemente fallemos muchas veces al principio, pero con práctica y paciencia empezaremos a ver resultados pronto y cada vez más seguido.
Este ejercicio requiere de otra persona que intente desarrollar (o ya tenga) sus capacidades telepáticas. Es necesario, al menos al principio, que sea siempre entre las mismas personas. Cada uno tendrá que estar en habitaciones separadas y sin hablarse, uno deberá dibujar algo en una hoja. Cuando termine se concentrará en ese dibujo y lo transmitirá mentalmente al otro participante, quien procederá a copiarlo. Es necesario empezar por figuras básicas: líneas, puntos, figuras geométricas y luego de algunos éxitos podrá elaborar dibujos más complicados.
Este ejercicio también es de a dos o más personas. Una persona o emisor del grupo deberá poseer en su mano izquierda un juego de 5 tarjetas de colores (violeta, azul, rojo, verde y naranja). Asimismo en la otra mano sujetará otro de 5 tarjetas blancas enumeradas del 1 al 5. El grupo deberá ponerse de acuerdo en un horario para que el emisor comience el ejercicio. En ese momento el emisor tomara una tarjeta de color y una de número al azar y las anotará en una libreta (incluyendo fecha y hora, para luego poder comparar). Luego las transmitirá hacia nuestras mentes. El resto de los participantes intentaremos conectarnos telepáticamente y por una fracción de 5 minutos repetiremos mentalmente el color y el número percibidos. Luego también los anotaremos en nuestras libretas, para luego compararlas al finalizar la semana. Como siempre veremos mejores resultados cuanto más practiquemos y podremos complejizarlo también aumentando la cantidad de colores y números, realizando nuevas combinaciones. Es fundamental alternar el rol de emisor al finalizar la semana para que todos puedan vivenciar ambas experiencias.
Este es el ejercicio más complejo en cuanto al nivel de información transferida. Se puede realizar con dos o más personas. El elegido como emisor deberá conducir a los demás por un viaje imaginario a un lugar que sea habitual para todos. Tendrá que anunciar su viaje en voz alta, pero omitiendo ciertos detalles sensoriales del mismo. Olores, sonidos, colores. Mientras viajan, deberán anotar en un papel esas sensaciones omitidas. Cuantas más coincidencias, mejor el resultado. Dejaremos “en blanco” más información a medida que vayamos consiguiendo más éxitos. Es posible cambiar receptores emisores en una misma sesión.
Una forma admirable de comunicarnos con otras personas enlazando nuestras energías es a través de telepatía en sueños. Pensar antes de ir a dormir en una persona determinada, por período de una semana, esa persona debe hacer lo mismo con nosotros y durante toda la semana debe ser la misma persona. al final del tiempo intercambiar información de si se soñó con la persona o tuvieron sueños similares.
Fuente: Micartaastral.com
Es cuestión de probar y ver como nos vá, si no logramos el tan esperado enlace al menos ejercitaremos nuestro cerebro para fortalecer nuestra mente y concentración, Meredith
La telepatía (del griego τηλε tēle, «lejos» y πάθεια pátheia, «sentimiento») consiste en la transferencia de pensamientos o sentimientos entre individuos a través de la mente, sin el uso de los cinco sentidos. Es considerada como una forma de percepción extrasensorial o cognición anómala. La telepatía se relaciona a menudo con diversos fenómenos paranormales como la precognición y la clarividencia.
Aunque se han llevado a cabo muchos experimentos sobre la telepatía, su existencia no es aceptada por la gran mayoría de la comunidad científica, entre otras cosas, argumentando que las magnitudes de energía que el cerebro humano es capaz de producir resultan insuficientes para permitir la transmisión de información. No obstante, algunos investigadores señalan que, con la tecnología necesaria, en un futuro será posible interpretar las ondas cerebrales mediante algún dispositivo y enviar mensajes textuales a un receptor de manera inalámbrica
Tiene que ver con la transmisión de pensamientos a través de la mente -como la mente es tan poderosa- podemos afirmar que desarrollar poderes telepáticos es relativamente sencillo siempre y cuando nos ejercitemos constantemente.
Desde luego, a algunas personas les resultará más sencillo, pues su mente se encuentra más abierta y más dispuesta a enviar señales; a su vez, si la persona con la cual intentamos entablar comunicación telepática está sensibilizada para estos ejercicios, será más rápida la comunicación mental.
LOGRARLO A TRAVÉS DE LA PRÁCTICA
El primer ejercicio es tal vez el más difícil y es relajarse. Hay que buscar un lugar cómodo y sereno; aquietar la mente, llevarla a un páramo de paz y tranquilidad. Hay que lograr llevar toda nuestra energía al plexo solar. Una vez dominada la relajación y pudiéndola adquirir en cualquier entorno y situación estaremos listos para la comunicación a distancia.
El siguiente ejercicio es también individual y se puede realizar en cualquier momento. Cuando vayamos caminando por la calle, o en una fila o en cualquier otra situación que tengamos alguien delante de nosotros, nos concentraremos en esa persona y le transmitiremos el siguiente pensamiento: “Te estoy llamando, date vuelta”. Probablemente fallemos muchas veces al principio, pero con práctica y paciencia empezaremos a ver resultados pronto y cada vez más seguido.
Este ejercicio requiere de otra persona que intente desarrollar (o ya tenga) sus capacidades telepáticas. Es necesario, al menos al principio, que sea siempre entre las mismas personas. Cada uno tendrá que estar en habitaciones separadas y sin hablarse, uno deberá dibujar algo en una hoja. Cuando termine se concentrará en ese dibujo y lo transmitirá mentalmente al otro participante, quien procederá a copiarlo. Es necesario empezar por figuras básicas: líneas, puntos, figuras geométricas y luego de algunos éxitos podrá elaborar dibujos más complicados.
Este ejercicio también es de a dos o más personas. Una persona o emisor del grupo deberá poseer en su mano izquierda un juego de 5 tarjetas de colores (violeta, azul, rojo, verde y naranja). Asimismo en la otra mano sujetará otro de 5 tarjetas blancas enumeradas del 1 al 5. El grupo deberá ponerse de acuerdo en un horario para que el emisor comience el ejercicio. En ese momento el emisor tomara una tarjeta de color y una de número al azar y las anotará en una libreta (incluyendo fecha y hora, para luego poder comparar). Luego las transmitirá hacia nuestras mentes. El resto de los participantes intentaremos conectarnos telepáticamente y por una fracción de 5 minutos repetiremos mentalmente el color y el número percibidos. Luego también los anotaremos en nuestras libretas, para luego compararlas al finalizar la semana. Como siempre veremos mejores resultados cuanto más practiquemos y podremos complejizarlo también aumentando la cantidad de colores y números, realizando nuevas combinaciones. Es fundamental alternar el rol de emisor al finalizar la semana para que todos puedan vivenciar ambas experiencias.
Este es el ejercicio más complejo en cuanto al nivel de información transferida. Se puede realizar con dos o más personas. El elegido como emisor deberá conducir a los demás por un viaje imaginario a un lugar que sea habitual para todos. Tendrá que anunciar su viaje en voz alta, pero omitiendo ciertos detalles sensoriales del mismo. Olores, sonidos, colores. Mientras viajan, deberán anotar en un papel esas sensaciones omitidas. Cuantas más coincidencias, mejor el resultado. Dejaremos “en blanco” más información a medida que vayamos consiguiendo más éxitos. Es posible cambiar receptores emisores en una misma sesión.
Una forma admirable de comunicarnos con otras personas enlazando nuestras energías es a través de telepatía en sueños. Pensar antes de ir a dormir en una persona determinada, por período de una semana, esa persona debe hacer lo mismo con nosotros y durante toda la semana debe ser la misma persona. al final del tiempo intercambiar información de si se soñó con la persona o tuvieron sueños similares.
Fuente: Micartaastral.com
Es cuestión de probar y ver como nos vá, si no logramos el tan esperado enlace al menos ejercitaremos nuestro cerebro para fortalecer nuestra mente y concentración, Meredith