BAJO ASTRAL:
Es lo que la religión católica llama “infierno”, un lugar de sufrimiento y expiación de culpas para quienes infringiendo gravemente las leyes del plano y cometieron delitos.
Por Ley de Afinidad y Vibración, recibe a los desencarnados que allí aprenden lecciones muy duras y difíciles en condiciones de error, de sufrimiento. No hay castigo alguno sino lecciones por aprender y la Ley de Retribución en acción, que es la justicia impersonal. Tampoco las penas son “eternas”, pues cesan para cuando los desencarnados se arrepienten de sus delitos, piden clemencia.
El Bajo Astral, se encuentra ubicado en una dimensión inmediata a la Tierra, pero más sutil: La Cuarta. En el Primer plano de la Cuarta Dimensión, está el Astral y tiene siete subplanos o divisiones. Los dos primeros subplanos, (especialmente, el número uno) son el Bajo Astral, escuela de aprendizaje fuerte para quienes tienen graves delitos por pagar y deben compensar, rectificar su conducta. Las condiciones difíciles de sufrimiento persisten.
En el Bajo Astral, no hay demonios con rabos ni calderas de fuego ardiente. Esas son fantasías infantiles para mentalidades de otros siglos. Al descorrerse en el velo con la luz de los tiempos modernos, resulta posible una comprensión mayor de la verdad espiritual.
AE/pch
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"Que el Gran AMOR Infinito de el DIOS UNO Padre-Madre te envuelvan en la Suprema LUZ Divina. "
Es lo que la religión católica llama “infierno”, un lugar de sufrimiento y expiación de culpas para quienes infringiendo gravemente las leyes del plano y cometieron delitos.
Por Ley de Afinidad y Vibración, recibe a los desencarnados que allí aprenden lecciones muy duras y difíciles en condiciones de error, de sufrimiento. No hay castigo alguno sino lecciones por aprender y la Ley de Retribución en acción, que es la justicia impersonal. Tampoco las penas son “eternas”, pues cesan para cuando los desencarnados se arrepienten de sus delitos, piden clemencia.
El Bajo Astral, se encuentra ubicado en una dimensión inmediata a la Tierra, pero más sutil: La Cuarta. En el Primer plano de la Cuarta Dimensión, está el Astral y tiene siete subplanos o divisiones. Los dos primeros subplanos, (especialmente, el número uno) son el Bajo Astral, escuela de aprendizaje fuerte para quienes tienen graves delitos por pagar y deben compensar, rectificar su conducta. Las condiciones difíciles de sufrimiento persisten.
En el Bajo Astral, no hay demonios con rabos ni calderas de fuego ardiente. Esas son fantasías infantiles para mentalidades de otros siglos. Al descorrerse en el velo con la luz de los tiempos modernos, resulta posible una comprensión mayor de la verdad espiritual.
AE/pch
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"Que el Gran AMOR Infinito de el DIOS UNO Padre-Madre te envuelvan en la Suprema LUZ Divina. "