Buenos dias:
Hermana Negrafrancisca concuerdo con usted en casi toda su recomendación, pero según mis enseñanzas y se que la de muchos el poder de la luz de la vela, la llama encendida, el fuego, es una arma poderosa desde los comienzos del mundo no solo para beneficio del hombre sino también para limpiezas espirituales, no todas las limpiezas se hacen con baños, para limpiar depende del estado de la persona se puede realizar con oraciones, imposición de manos, baños, ayunos, cambios de alimentación, fuego y el más importante la actitud ante la adversidad; de nada nos sirve todo lo demás si no tenemos fé y seguridad que todo vá a cambiar ni un camión de ruda con una gandola de velas y un torrente de agua podrá contra la predisposición de tus pensamientos.
Si creo que la vela puede limpiar, claro que sí, todo depende del problema, quien lo haga y el momento y lugar...dijo una vez un hermano espiritual: mija, vale mas un tuco e vela que la vela completa mi oyó mija?...
Las velas han sido herramientas cotidianas para conjurar la oscuridad de la noche, han sido servidoras de la Luna e incluso valerosas sustitutas. Han sido testigos imprescindibles de grandes ceremonias y testimonios de respeto. Iluminan con su titileo la mirada de la persona amada, que espera nuestra confesión de compromiso para el futuro. Los cirios expresan la fe del devoto que ruega por la intercesión del Santo para conseguir su propósito. Una vela grande traduce un agradecimiento grande del que ha sido bendecido y tiene el corazón lleno de gratitud. El chasquido de un fósforo contra lo áspero de la caja anuncia el inicio del ritual de un deseo por cumplir. ¿Qué hubiera hecho la humanidad sin las velas?
No hay historia en el mundo que no haga referencia al fuego y a su indiscutible presencia en el hombre.
El fuego es generador de todo y destructor, base principal de los opuestos, elemento necesario de la creación, las llamas son el principio.
En algunas ocasiones son también el fin.
El fuego es fuente de luz y en la luz proveniente del fuego incandescente del sol, que tienen en las velas sus humildes pero muy valiosas imitadoras.
El fuego, el aire, la tierra y el agua se unen en las ceremonias espirituales de nuestra tierra en las que los espiritistas dirigen rituales con velas que viajan sobre las aguas de los ríos y las orillas de la tierra de los lugares santos, consumiendo la noche con la fuerza del fuego para así llegar a un amanecer bendecido. Bueno, también es que yo siento una fuerte atracción hacia el fuego y sus misterios tanto en el mundo espiritual como el personal.
Toda limpieza hecha con fé y con la guía espiritual o terrenal correcta te traerá evolución, elevación y paz.
Qe mi mamaita santa te bendiga y te porteja con su luz
cariños
aury