Ser feliz es todo
Cada día que amanece es una página en blanco, para que podamos escribir un capítulo más de nuestra propia historia.
Es una oportunidad renovada por el Creador, para que conquistemos nuestro objetivo mayor que es ser feliz.
Al final, ¿quién no desea ser feliz?
Para dar una pequeña ayuda anotamos algunas actitudes que van a ayudar a usted a encontrar su felicidad:
-Acéptese tal como usted es, incondicionalmente.
-Usted no es el tamaño de su cuenta bancaria, el barrio donde vive, la ropa que usa o el tipo de trabajo que hace.
-Usted es, como todo el mundo, una mezcla extremadamente compleja de capacidades y limitaciones.
-Guste de aquello que usted tiene.
-Valore lo que se tiene – en vez de lastimarse por lo que no se tiene o no se puede tener – lo lleva a una felicidad mayor.
-Comprenda que la satisfacción completa no existe.
-Si usted piensa que es posible tener una vida perfecta, vivirá en eterna frustración.
-Altos y bajos, alegría y tristeza, entusiasmo y decepción son partes integrantes de la existencia. Luche siempre para mejorar y alégrese con sus conquistas.
-Su vida tiene un propósito y un sentido.
-Usted no está aquí apenas para llenar un espacio o ser un figurante en el filme de otra persona.
-El mundo sería diferente si usted no existiese. Cada lugar donde usted estuvo y cada persona con quien usted ya habló serían diferentes sin usted.
-Los acontecimientos son temporales.
-El tiempo realmente cura todo. Nuestras decepciones son importantes y serias, pero la tristeza pasa y la vida nos lleva por nuevos caminos.
-Dé tiempo al tiempo.
-No se olvide de divertirse.
-Reserve, todos los días, algún tiempo para divertirse, reír y relajar la mente.
-Sea flexible.
-Muchas veces, cuando queremos estar en la compañía de nuestros amigos y parientes, queremos que las cosas ocurran exactamente como deseamos. Si todas las personas lidiasen con las relaciones de esa manera nadie se sentiría feliz.
-Sea su propio fan.
-Necesitamos confiar en nosotros mismos, con fuerza y constancia. Cuando sienta desanimo, reconózcalo, pero no se entregue a él. Procure superarlo y seguir adelante.
-Abrase para nuevas ideas.
-Nunca pare de aprender y de adaptarse. El mundo está siempre cambiando. No deje su vida girar entorno de una sola cosa. La vida es hecha de muchas facetas diferentes.
-La obsesión por alguna cosa nos vuelve incapaces de disfrutar otras y nos hace perder oportunidades de belleza y alegría.
-Usted no tiene que vencer siempre. Las personas ultra-competitivas, que necesitan vencer siempre terminan disfrutando menos las cosas. Cuando pierden, terminan muy frustrados, y, cuando ganan, era eso lo que esperaban de cualquier modo. Sobre todo no se armonizan con el ritmo natural de la vida, que es hecho de ganancias y pérdidas.
-No se concentre en las tragedias del mundo, sino en sus esperanzas. Muchas cosas tristes ocurren en nuestro mundo, pero, en vez de concentrarse en ellas, tenga esperanza en el futuro. Piense en cuántos avances ya hubo y en el potencial del mundo. Si usted tuviera esperanza, sentirá estímulo y contribuirá para los cambios. Si su perspectiva fuera pesimista, pensará que no ayuda hacer nada y perderá el ánimo.
-Preste atención. Usted tal vez tenga lo que desea. La tendencia humana es siempre querer más. Por eso es tan importante darnos cuenta de lo que tenemos y de lo que conseguimos alcanzar durante la vida.
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Estas son apenas algunas actitudes que pueden ayudarlo a usted a escribir una historia diferente a partir de hoy. Ellas son resultado de investigaciones hechas por el Dr. David Niven, que da conferencias en la Florida Atlantic University. Por sus investigaciones, el autor recibió premios de la Universidad Estatal de Ohio y de la Universidad de Harvard. Si usted desea realmente ser feliz, vale la pena anotar estas indicaciones y vivirlas. Piense en eso, ¡pero piense ahora!
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«Aparte del Espíritu protector ¿está unido un mal Espíritu a cada individuo, con miras a incitarlo al mal y darle ocasión de luchar entre el bien y el mal?
- "Unido" no es la palabra exacta. Bien es verdad que los malos Espíritus tratan de desviar del camino recto al hombre cuando se les presenta la oportunidad: pero si uno de ellos se apega a un individuo, lo hace por determinación propia, porque espera que el hombre le haga caso. Entonces se desarrolla una lucha entre el bueno y el malo, y la victoria corresponderá a aquel cuyo dominio el individuo entregue»
Libro de los Espíritus, cuestión 511.