Ogum y la fuerza de voluntad
Ogum, el dios del hierro y la guerra es una de las deidades del panteón yoruba que mayor aceptación ha tenido en América Latina y es natural, ¿quién está más presente que él en nuestra vida? ¡Bien! atendiendo al concepto no humanizado sobre este Orixá y comprendiendo su existencia como irradiación vibratoria divina presente en toda la Creación Ogum representa esa energía que está asociada a la lucha, el ímpetu, el deseo, las pasiones, actitud, perseverancia, persistencia, tenacidad, renacimiento y todo aquello que impulsa al hombre en determinada dirección, es decir, es la irradiación a quien corresponde la voluntad y el concepto de fuerza que conjugados transforman al individuo más flaco en una firme y sólida montaña inaplazable o ¿por qué no? Un tanque de guerra en movimiento capaz de aplastar todo a su paso y abrirse camino por los mecanismos de la fuerza lo que generalmente delata la influencia de este Orixá sobre los denominados hijos o regidos por esta irradiación divina cósmica y que repercute de fuerte manera sobre la vida que ha de tener la persona y el proceso de transformación que ha de desenvolver mientras se encuentra enfrentado a las pruebas y dificultades de la vida física.
Ogum es asociado al planeta Marte que en la astrología define mucho mejor de lo que las leyendas humanizadas la participación de este personaje en la vida en todas sus expresiones ya que desde el microcosmo hasta el macrocosmo su energía está presente haciendo surgir y avanzar todo, desde la semilla que sembrada germina realizando enormes fuerzas tomando los recursos que lo rodean hasta superar la densa capa de tierra que lo sepulta y con ello emprender dirección hacia la luz del Sol tomando cada vez más y más altura hasta la lucha que lleva a cabo un enfermo en agonía por ganar cada vez un minuto más de vida; él está en cada niño que nace, en cada persona que realiza esfuerzos por lograr algo, en cada ser que lucha por sobrevivir.
En sus aspectos positivos encontramos lealtad, honestidad, sentido de responsabilidad, deber, perseverancia, firmeza, justicia, rectitud, honor, moral, etc., mientras que por el lado negativo lo encontramos en las manifestaciones de violencia, prepotencia, altanería, implacabilidad, odio, venganza, ira, y semejantes. Como podrán ver, tan positivo como negativo es mutable acorde a la dirección que el sujeto le da a partir de la sintonía que realiza y así mismo en la vida del ser humano esa energía que se presta para construir como para destruir puede otorgar al sujeto las actitudes y condiciones para que pueda surgir y enfrentar las pruebas de la vida con una postura más firme y capaz de superar todo obstáculo que se nos presenta provenientes de toda clase de fuentes de la Creación. Supongamos que eres una persona con complejo de inferioridad, te falta confianza en ti mismo y te juzgas demasiado débil e incapaz de realizar una actividad en particular, este cuadro refleja con claridad no la ausencia sino la dificultad para fijarse la energía de Ogum sobre la personalidad y es que el ser humano, a través de los mecanismos de la mente, que procede de la imposición del Espíritu, posee mecanismos bien complejos capaces de materializar en el plano de los vivos solo aquello admisible dentro del estado íntimo de la persona, es decir, aquel que fija su mente y sentimientos sobre el fracaso sencillamente está rechazando la fuente que alimenta su voluntad y confianza impidiendo así que el Orixá realice una intervención adecuada aproximándolo a la posibilidad de conquista y victoria; este problema de sintonía que parte de una estructura mental que atenta contra la integridad del ser [mecanismo que regula lo que se materializa de entre los pensamientos] al alimentar un sistema de creencia basado en el negativismo impide la fijación, por tanto, alimentación desde la fuente de una energía que asimilada como asimilamos los hombres los nutrientes por la alimentación, podría vigorizarnos y hacernos más competentes para la lucha y el trabajo necesario.
Integridad del ser :
Integridad del ser
Estudios recientes sobre la región mental del cerebro llamada subconsciente y sobre los efectos de las impresiones grabadas en él muestran que su capacidad de interferir en el funcionamiento del cuerpo es muy grande. Freud fue uno de los primeros a percibir que las actividades mentales podrían modificar las funciones normales del organismo, abriendo así las perspectivas para una nueva ciencia llamada psicosomática.
Actualmente las investigaciones sobre estrés vienen siendo ampliamente divulgadas. A lo poco el hombre va constatando que las actividades mentales desempeñan significativa participación en el desenrollar de las situaciones materiales y en la salud del cuerpo.
Para comprender por qué las personas enferman o presentan alteraciones en diferentes partes del cuerpo, bien como por qué unos viven enfermos mientras otros son saludables, fue desenvuelto este estudio de Metafísica de la Salud. El objetivo es concientizarlo de que su condición interno es un factor predominante para mantener la salud física y mejorar la calidad de vida.
El cuerpo acusa el modo como estamos lidiando con los acontecimientos. Cada parte de él refleja una emoción. Todas las alteraciones metabólicas tienen su origen en las actividades mentales. En este paralelo entre lo físico y lo mental, usted va a comprender que sus actitudes determinan la salud física bien como su condición de vida. Resumidamente, emoción es la respuesta a los estímulos mentales que alcanzan el bajo vientre emitiendo ondas cíclicas que suben. Sentimientos, a su vez, son vibraciones emitidas del pecho, también fruto de las actividades mentales. De acuerdo con la manera como estamos respondiendo a las situaciones de la vida, tenemos una afectividad saludable o no. Salud existe cuando pensamos y actuamos en concordia con nuestra naturaleza individual o nuestro temperamento. Sin embargo, si estuviéramos en desacuerdo creamos conflictos que perturban nuestra estabilidad afectiva que se manifiestan en el cuerpo como desequilibrio o síntomas.
El sistema de integridad actua en nivel de subconsciente. Él impide que un buen número de pensamientos sea transformado en realidad. Funciona como una defensa natural contra nuestra ignorancia. ¿usted ya imaginó si todos los pensamientos negativos cargados de intensidad fuesen inmediatamente transformados en realidad? Por cierto ni el mundo existiría. Cuando estamos emocionados formulamos centenas de pensamientos negativos, porque es natural en nuestro nivel de evolución no saber lidiar bien con nuestra afectividad.
El sistema de integridad selecciona el material que llega al subconsciente y solo deja volverse realidad aquello que es considerado su mejor. Él es el preservador de la evolución y de los objetivos de la vida en nosotros. Estamos protegidos de nuestra ignorancia, pero no de aquello de lo que tenemos consciencia.
Nuestra idea de la mejor manera de ver o hacer las coas va evolucionando con nuestras experiencias. Cada día sabemos hacer mejor las cosas. Cuando hacemos una cosa que es nuestro mejor medio de hacerla según nuestra relativa inteligencia, el sistema de integridad procura crear realidades basado en nuestros mejores patrones, incluso que nuestra acción sea negativa. Ejemplo de eso es la persona que maldice y se queja como forma de reaccionar a aquello que ocurre y de lo que ella no gusta. Para ella, esa es la mejor manera de actuar, pues todavía no aprendió a hacer mejor. En vez del subconsciente materializar negatividades, él sufre la acción del sistema de integridad y este selecciona patrones positivos para materializar, porque maldecir es lo mejor de la persona y él reproduce lo mejor.
En otras palabras: si usted hace su mejor, el subconsciente materializa lo que usted estandarizó como su mejor. Pero si usted, movido por escuchar los palpites ajenos, resuelve reaccionar de una manera que no es su mejor, entonces el sistema de integridad va a retraerse y algo proporcional a lo que usted está creyendo en aquel momento se materializará. Su mejor lo protege.
Lo mejor suyo es clasificado por las experiencias que usted vivió y nunca por lo que usted aprende teóricamente. Usted puede tener una cabeza llena de moral y valores aprendidos filosóficamente, pero ellos nada tienen que ver con lo mejor suyo. Es necesario que usted haya sentido de cuerpo entero un pensamiento para que él sea reconocido como lo mejor. Si usted ya experimentó el perdón y sintió cómo él es benéfico, entonces pasa a ser un patrón y si usted no perdona entonces su acto será tenido como lo peor y su realidad será negativa.
Así, cuando una mujer que sabe darse a los otros y tiene como experiencia la satisfacción afectiva de darse de una cierta forma se niega a dar porque se decepcionó de los otros, ella no está haciendo lo mejor suyo, y así ella perderá la natural protección del sistema de integridad y probablemente presentará su resentimiento como un bulto en el seno. Si el hecho de ella negarse fuese lo mejor de ella, el resentimiento no se transformaría en bulto en el seno, porque el sistema de integridad habría impedido eso. Por tanto, toda enfermedad es algo que usted está haciendo y manteniendo que no es lo mejor suyo de acuerdo con su evolución. Eso explica por qué personas más evolucionadas de lo que nosotros están enfermas, porque por cierto ellas no están haciendo algo exactamente de acuerdo con su evolución. Eso también explica por qué una persona más atrasada que nosotros puede estar gozando de plena salud: ella, incluso en su ignorancia, está haciendo lo mejor suyo.
Un acto puede ser natural para una persona y peligroso para otras. El universo se organiza bajo la ley de la individualidad. La ley de la vida es relativa a la individualidad, a la evolución y a la singularidad.
En suma, la persona solo termina enferma cuando sus pensamientos y acciones son contrarios al flujo de su naturaleza intima y su relativa sabiduría. Generalmente eso ocurre cuando se intenta cambiar el modo de ser para agradar a otros. Es el caso de una persona comunicativa que pasa a censurar su expresión, volviéndose callada. Eso puede causar enfermedades en la garganta. Lo mismo ocurre con los niños que son constantemente reprendidos en la expresión verbal; generalmente ellas presentan inflamaciones en la garganta.
En la concepción metafísica existe un factor de fundamental importancia: no es la situación externa la que determina la condición interna. El medio contribuye, pero no es un factor determinante, ten en cuenta cada uno reacciona de una manera frente a las mismas situaciones. Delante del desprecio, por ejemplo, existen aquellos que se revueltan, volviéndose agresivos; otros se reprimen y se sienten carentes; hay también aquellos que se vuelven independientes. Dependiendo del nivel de evolución de cada uno, todo puede dar en nada. Es común encontrar personas que fueron maltratadas en la infancia y ni por eso son revueltas; al contrario, mantienen su dignidad y respeto propio. Por otro lado, existen aquellos que fueron tratados bien y, sin embargo, son rebeldes y malhechores. En fin, no somos frutos del ambiente, pero sí conspiradores con todo lo bueno o malo que nos ocurre en la vida, bien como responsables por la salud o por las enfermedades que afectan el cuerpo.
La postura frente a los episodios es que determina el desenrollar de los hechos. Por más desagradable que vengan a ser los resultados, usted tiene una parcela de responsabilidad sobre ellos. Cualquiera que haya sido su actitud, usted generó la situación que hoy lo está asediando. Su conducta actual frente a lo que lo rodea podrá tanto agravar como atenuar el reflejo de una postura interior. Basta que usted siempre haga lo mejor suyo y no se deje afectar por los palpites de los otros.
La enfermedad en el cuerpo es desencadenada por las actitudes nocivas a usted en particular, ya que su evolución es relativa a lo que usted experimentó. No se puede decir que una persona, en sana consciencia, escoge tener una determinada enfermedad. Ella surge como un reflejo de su condición interna.
Al adquirir la consciencia metafísica de una disfunción orgánica, usted obtiene un importante recurso para reorganización del mundo interno. Esta reformulación irá a reflejar en el ambiente externo, creando una nueva condición de vida, principalmente en el cuerpo, en forma de salud y vitalidad.
Si por un lado la consciencia metafísica quita todos sus coartadas para justificar sus propios infortunios, por otro rescata su poder de alterar las condiciones desagradables de la vida, bien como el de reconquistar la salud del cuerpo.
Rescatar la salud representa volver a hacer lo mejor suyo y aceptar con modestia y buena voluntad lo que usted es. Tendrá por tanto que aprender a confiar en sí y a tener el coraje de ser usted mismo delante de las expectativas y cobranzas del mundo.
¿Alguna vez ustedes han sabido de que todos los seres de la Creación somos energías y que estamos sometidos a eterno intercambio de fluidos con el medio en que nos encontramos? ¡pues así es! Y en este caso eso tiene relevancia ya que ese intercambio de energía sea positiva o negativa produce un tipo de retroalimentación constante que condiciona a nuestro espíritu, y con ello, es llevado todo eso a la vida física como tal al pasar por los procesos de materialización. Hay una frase que dice: “tú eres lo que comes” y eso aplica aquí; hay en nuestro mundo como en otros dos tendencias generales: la de los vampiros y las esponjas. Unos absorben la energía o fluido positivo del medio y otros se nutren de lo negativo, del desecho y aquí vemos a partir del estudio de esas personas cómo esas sutilezas afectan la vida íntima y externa de la persona llegando a definir la posibilidad de éxito o fracaso, de malestar o bienestar, de buena suerte o mala suerte, de alegría o tristeza, etc., siendo que si una persona se expone a un ambiente repleto de energías asociadas a la tristeza, sentimiento de inferioridad, miedos, etc., y se encuentra en condición de sintonizar con ello va a atraer para sí esos fluidos que hará suyo, se va, en otros términos, a nutrir de esos fluidos y los va a expresar y así la persona que pudo estar positiva antes de entrar en ese ambiente pasa a somatizar los efectos de esa energía que su espíritu traduce y que por repercusión vibratoria alcanza el sistema nervioso de la persona e impone esos estados alterados. ¿Complejo? ¡lo es! Pero ¿por qué explico esto? ¡simple! Si bien hay individuos que desde el nacimiento se les identifica una regencia natural, como si la fuente de esa energía los mirara y lanzara sus fluidos directamente sobre ellos, hay una regencia general entendiendo que su manifestación está presente en la vida en todos sus aspectos permitiendo así el balance sobre la Tierra, es uno de los principios que permiten la preservación de lo creado, con esto digo, desde el criterio umbandista a partir de la enseñanza de los Espíritus hemos podido constatar que efectivamente podemos sintonizar con todas esas fuentes de energía natural pudiendo imantarnos o como ya dije, alimentarnos de esos fluidos para luego expresarlos en nuestras vidas de manera positiva, ahí entra el trabajo consciente de querer vincularse a esa fuente y armonizar con esas energías a fin de poder utilizarlas como un complemento a lo que se posee intrínseco para avanzar en todo lo que nos proponemos en la vida, eso es lo que se llama sublimar algo, y ¿por qué consciente? Porque los mecanismos de sintonía ocurren a partir de la atención donde la fijamos, siendo que si por ejemplo lo visualizas a él como fuente de una energía y te centras en que es violento, déspota, implacable, vengativo vas a terminar de entre todo lo que posee atrayendo la energía de él afín a donde se ha colocado la atención y con ello la combinación que realiza el inconsciente para graduarlo mejor lo hará que se manifiesta en nuestra personalidad en base a esas actitudes contempladas, es decir, se ha canalizado mal su energía y por ende, cabe la posibilidad de empeorarlo todo si se aplica mal también. Luego entra el mecanismo de integridad del ser que selecciona el material del inconsciente para llevarlo al plano físico, graduándolo hasta materializarlo por medio de la modificación de los fluidos del medio, ahí la persona aparte de hacer violenta, déspota, implacable, etc., va a empezar a ver desde el exterior venir violencia, imponencia, injusticia y todo aquello que va de una u otra manera a alimentar y fortalecer esas actitudes ya canalizadas que luego van a ser una influencia negativa que va a demandar la limpieza de los fluidos modificados generalmente negativos y agregar algo diferente pero no vamos a olvidarnos de que si no se modifica el patrón mental del sujeto enseñando a tener disciplina para controlar dónde pone su atención, el problema va a seguir ocurriendo y esto es uno de los problemas existenciales que enfrentan los que tienen una regencia natural de Ogum, que terminan emancipando los aspectos negativos y por ello viven una vida llena de polémica y conflictos que los obliga a vivir eternamente en pleitos.
Simpatía a Ogum para apertura de caminos :
Con una vela o velón de color rojo vamos a orar lo siguiente:
Señor Ogum, tú que eres el origen de las actitudes valerosas de la voluntad y la lucha, que nos conduces al progreso y la supervivencia, que nos haces luchar incesante y que gracias a eso existo en eterna batalla como guerrero que un día clamará victoria en alabanza a ti, hoy quiero pedirte que me ayudes a apartar de mi íntimo, de mi camino y de mi vida todo obstáculo que pretende impedir mi avance, la conquista de aquello que anhelo y por consecuente toda oportunidad de felicidad y alegría, de paz y prosperidad; aparta de mí las trabas nacidas en mi mundo mental y que se expresan en debilidad y pesadez en el cuerpo físico y atrae a mí la artillería para derrumbar los muros que desde mi mente me impiden progresar permitiendo desarrollar el vigor de la confianza en mi cuerpo físico para ser capaz de realizar todo aquello que me propongo día con día. Aparta de mi camino toda aquella influencia destructora emitida por mis hermanos de la vida y dirigidas hacia mí ya sea por descuido mío o por maldad de ellos, protégeme pues, de los malos deseos para que estos no se materialicen en ningún aspecto de mi vida. Libera mis caminos de los encantos ilusorios de la materia que desvían a los espíritus de su propósito en la vida y dame la capacidad de mantener mi mente fija en el objetivo que persigo a fin de sobrepasar mis propios límites haciendo lo que fuese necesario para conseguirlo. Libera mi espíritu de la presencia de energías pesadas que me hacen perezoso y de mala voluntad, tráeme disciplina, perseverancia y fuerza en la voluntad para imponerme a toda adversidad y si tengo espíritus a mi alrededor que conspiran contra mí edificando obstáculos persiguiendo mi fracaso ciégalos y ensórdeselos pero apártalos de mí, ya que ellos fracasaron en la prueba de la voluntad y por cobardía no se atrevieron a conquistar el éxito, permíteme a mí estar protegido de todos ellos que atacan mis pensamientos llenándolos de dudas y mis sentimientos exaltando emociones peligrosas. Así resumo señor Ogum, pelea junto a mí las batallas de mi vida y enséñame a conquistar mis propias metas, a lograr mi misión y a superarme cada día más por encima de todas aquellas fuerzas que solo desean mi perdición. Abre mis caminos y bríndame la oportunidad de demostrar, cobijado por tu energía, mi condición de guerrero vencedor en las pruebas de la vida y no me desampares en ningún momento dejándome a merced del fracaso, el tedio, la pereza y ligereza. ¡Oguñé!
El que utilice el velón debe de establecer una disciplina de oración como primer reto, a orar y pedir en los momentos claves a lo largo del día como un medio de afirmar y fortalecer el pedido, lo que hará el que utiliza las velas con la constancia. Aquel que se atreva, entienda que estas energías operan en virtud de la dirección que se les da y con ello si se deja al inconsciente tomar comando de esas fuerzas una revolución puede ocurrir en sus vidas, por ello, hay que atreverse a comandar desde la voluntad el pensamiento y las emociones a fin de que no te arrastren a direcciones indeseadas y poder centrarse solo en aquello que se quiere. Yo les di una formula pero sepan que se puede generar toda oración particular ya sea para corregir un defecto, para desarrollar una virtud, para lograr algo, para apartar algo, para ser felices, etc., son medios de canalizar y darle dirección a esa energía, incluso se puede usar para neutralizar enemigos tanto físicos como espirituales a través de la oración inteligible. En el momento de recogimiento que es el lapso previo a realizar la oración, en lugar silencioso y calmado, lejos de lo profano, la persona debe reflexionar sobre aquello que quiere lograr y por qué lo quiere lograr, fijar cuáles son sus dificultades mentalmente que quiere superar y entre tanto, ese ideal que tiene construido en su mente y con ello, al producirse el acercamiento la intuición o el sentido común anunciará el momento de realizar el pedido a través de esta simpatía, esto es reflejo claro de que la espiritualidad está pronta, cerca y preparada para tomar el pedido y lanzarlo al espacio ejecutando los comandos dados en la oración y con ello tengan certeza, así como los Espíritus existen y realizan cosas grandes, que este Orixá, y los Espíritus que apoyan su trabajo existencial van a producir cambios sólidos en sus vidas si es que se atreven a cambiar y sobretodo, quieren cambiar. De ustedes mucho depende la tasa de éxito de todo trabajo simple realizado aquí y que no los hará tener que ir a dejar el sueldo por aquí o por allá tanto en terapeutas como en espiritualistas.
pregunta 117 del Libro de los Espíritus :
117. ¿Depende de los Espíritus mismos acelerar su progreso hacia la perfección?
- Por cierto que sí: llegan más o menos pronto, según su deseo y su sometimiento a la voluntad de Dios. Un niño dócil ¿no se instruye más rápido que uno reacio?
Comentario: Ogum es una cualidad de Dios, es decir, una de sus manifestaciones en la Creación, una energía que se desdobla de Él y por ello, es fácil entender o fijar en uno de esos aspectos que quien se dispone a solicitar el auxilio de un Orixá como lo hace con Dios ha de hacerse sumiso a su voluntad y eso quiere decir, tener la osadía de trabajar y desarrollar las aptitudes y actitudes relacionadas a él. ¿Quiere hacerse leal, justo y disciplinado? Haciendo lo contrario no ocurrirá jamás. No sean de esos que dicen “yo quiero” pero la voluntad no les pasa de los labios y que peor que eso, se contentan con que eso que dicen querer no se realice nunca.
A continuación referencias del cine sobre sujetos que sin conocimiento metafísico emplearon los recursos de esta deidad para construir su éxito, reflejando así, en su filosofía de vida y sus acciones la energía materializada de esta fuente divina.
Algunos vídeos referenciales al tema :
Aquí la prueba de disciplina y perseverancia como factor clave del éxito a la hora de realizar algo. La mente como primer filtro de las energías sutiles del Universo que contribuyen a expresar a través del cuerpo por la acción todos aquellos milagros asociados a ella.
Este vídeo refleja en su letra, asociando al filme, dos evidencias una textual u otra cinemática sobre un ejemplo de Ogum expreso en la vida.
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«Aparte del Espíritu protector ¿está unido un mal Espíritu a cada individuo, con miras a incitarlo al mal y darle ocasión de luchar entre el bien y el mal?
- "Unido" no es la palabra exacta. Bien es verdad que los malos Espíritus tratan de desviar del camino recto al hombre cuando se les presenta la oportunidad: pero si uno de ellos se apega a un individuo, lo hace por determinación propia, porque espera que el hombre le haga caso. Entonces se desarrolla una lucha entre el bueno y el malo, y la victoria corresponderá a aquel cuyo dominio el individuo entregue»
Libro de los Espíritus, cuestión 511.