Afortunadamente yo nunca tuve dinero suficiente para las cosas mínimas como para gastarlo en religión -aunque no siempre pensé así, en su momento lo sufrí- así que viendo esas particularidades de mi propia vida y las limitaciones me enfoqué en otras cosas y pude dar con muchas raíces en las que efectivamente al principio la liturgia no era algo costoso de magnitudes gigantescas ni desbordante de materiales y que todos esos excesos vendrían a ser la manera de llenar el vacío de fundamento litúrgico entre quienes no entendiendo los principios espirituales sería la cantidad y calidad de los materiales y no esos principios los que dan eficacia a la asistencia.
El aumento de materiales, liturgia cada vez más fetichista y repleta de exotismo, los costos desbordados, la degradación propia de la condición espiritual a favor de condiciones materiales constituyen también maneras perniciosas de transformar la espiritualidad en algo falso y netamente materialista y este es un hecho que por unos años pude ir comprobando en la propia investigación de por qué esto y aquello. Fueron muchas las veces previas a la Umbanda que supe del gran esfuerzo que los Espíritus oscuros hacen por añadir cada vez más materiales a los ritos educando mal espiritualmente a quienes le escuchan y los incentivan también a mutar sus valores y objetivos convirtiendo en un lucro en ocasiones sin escrúpulos y así es mucha la gente que sencillamente mirando hacia el Cielo -de acuerdo a la creencia- se resigna dice:
-"No tuve para comprar mi derecho a ti".
El caso es que, se convencen por una u otra vía de que todos los costos y materiales excesivos difundiendo un valor equivocado a la espiritualidad. Vean que mientras antaño era requisito el mérito moral para merecer la iniciación hoy día es el mérito financiero -sin discriminar la vía por la cual se adquiere- lo que determina tu máxima posición en una religión con jerarquía ya existe una creencia, quizá una ignorancia podría decirse, que hace suponer a la gente que puede comprar la evolución espiritual, un paraíso e imitando los sistemas corruptos de la Tierra, creen que pueden comprar su santidad mediante lo que llena y rompe el bolsillo. Analicen con frialdad sin convertirse en economistas la vida de quienes heredaron tales tradiciones a los que hoy son millonarios a costilla de las mismas; yo siempre me identifique con el negro de la senzala brasileña porque fueron despojados hasta del Alma cuando dijeron que no tenían Alma y no gozaban ni del mínimo para tener una vida mal lograda así que la mayoría iba a morir al poco tiempo y algunos privilegiados por ser útiles recibirían una atención un poco mejor pero, nunca tuvieron siquiera la opción de recurrir a cualquier material que hoy es top de ventas en carácter esotérico y vemos pese a ello que igual ellos tuvieron que curar enfermedades, animar Espíritus, consolar a los sufridos enloquecidos, debían sostenerse ellos mismos y ¿de dónde todo eso si estaban tirados al suelo privados de salir a recoger una rama del árbol más cercano? ¿dónde están las tiendas esotéricas donde los indios caribes compraban sus despojos? pero no se incomoden, si la brujería es costosa por los materiales y derechos las que no piden tales materiales te condicionan al bolsillo con la doctrina del billete más grande como prueba de fe así que ni donde se predica que Dios es un derecho concedido por gracia y primeramente para los pobres sucede que están exentos. Lo que quiero yo dejar claro es que esta transformación mercantil y llena de parafernalia es producto de la degradación espiritual y la falta de fundamentos litúrgicos; en mi investigación descubrí demasiadas cosas que no tienen utilidad más que para quien las vende y sencillamente asumiendo el reto, siguiendo el ejemplo de la rebelión mítica del hombre me atreví a ir rompiendo tabú y adivinen que... ¡no pasó nada malo! ¿por qué? ¡porque me deshice de lo innecesario y excesivo! así pude ver que, todo el rito que demanda despojar a alguien con materiales excesivos puede emularse y superarse si la persona sabe magnetizar ya que para ello solo requiere salud, moral y su cuerpo.
Yo no voy a decirles qué deben dejar de hacer y qué empezar a hacer, eso concierne a todos sobretodo porque venir a revolucionar lo que ya es aceptado y perpetuado por la propia voluntad de quienes hacen vida en ello está difícil pero sí les digo que este es el defecto de la tradición oral que es capaz de enseñar lo pernicioso y pasar cualquier insensatez por sabiduría porque no hay nada que regule eso. Como aquella anécdota de una anciana señora bruja de la localidad que es muy estimada contó una vez: vinieron espiritistas de todo el país a reunirse para trabajar y gastaron un dineral en material y en medio de eso llegó una señora clamando caridad para con ellos ya que necesitaba una cirugía y como comenta esta señora, si ellos hubiesen dado ese dinero a la mujer ella se opera, pero prefirieron comprar la vela, el velón, el licor, el tabaco y demás en un falso precepto de que es fumando, atendiendo, ofrendando y alabando que la evolución espiritual sucede. ¿Ustedes conocen aquella máxima que dice "fe sin obra" es estéril? pues bien... desde la aparición del Espiritismo y vertiente la máxima nueva ha sido: fuera de la caridad no hay salvación, lo que conduce a preguntar: ¿saben hoy día las personas adeptas de una religión que su progreso es espiritual y no está sujeto a materia? por 1 vela muchos prefieren hundirse.
En mi propio andar me formé para ser inútil empleando materiales top y ya una vela la considero lujo considerando la escasa economía así que me sucede como cuando me negué a dar ofrenda
de alimento a los Espíritus que ya están muertos cuando en realidad debería
de darla a los vivos que sí dependen
de ella para vivir y que ese, en un camino verdadero, debería ser lo que interesa por ofrenda: el sacrificio moral que es la única ofrenda verdadera.
:::Chico Xavier de Osóòsi:::_________________
«Aparte del Espíritu protector ¿está unido un mal Espíritu a cada individuo, con miras a incitarlo al mal y darle ocasión de luchar entre el bien y el mal?
- "Unido" no es la palabra exacta. Bien es verdad que los malos Espíritus tratan de desviar del camino recto al hombre cuando se les presenta la oportunidad: pero si uno de ellos se apega a un individuo, lo hace por determinación propia, porque espera que el hombre le haga caso. Entonces se desarrolla una lucha entre el bueno y el malo, y la victoria corresponderá a aquel cuyo dominio el individuo entregue»
Libro de los Espíritus, cuestión 511.