Si vas a emprender un viaje largo, reza esta oración tres días antes de iniciarlo (en las mañanas y al aire libre). Si te preocupa alguien que quieras y que viaja mucho, cópiale esta oración (en papel blanco y con crayón negro) y entrégala tres días antes de que inicie su recorrido. Mientras se viaja, también se puede leer esta oración de resguardo contra accidentes y conflictos motivados por causas ajenas a la voluntad. Al regresar del viaje, se quema el papel y se esparcen las cenizas al viento.
DAME, Dios mío, mano firme y mirada vigilante
para que a mi paso no cause daño a nadie.
A TI, SEÑOR, que das la vida y la conservas,
suplico humildemente guardes hoy la mía.
LIBRA, SEÑOR a quienes me acompañan de todo mal,
incendio o accidente
ENSEÑAME a hacer uso de mis manos
para remedio de las necesidades ajenas.
HAZ, en fin, Señor, que no me arrastre
el vértigo de la velocidad
y que siga y termine felizmente mi camino.
TE LO PIDO SEÑOR, por los méritos
de tu Santísimo Hijo Jesucristo,
y por la intercesión de la Virgen María. Amén.