Letanía es un nombre genérico por el cual se designan diversas especies de oraciones de intercesión, que presentan una forma de interpelación. La oración litánica es uno de los modos de oración más comunes. El origen de la oración litánica ha de buscarse en una oración que se realizaba en la sinagoga, que consistía en 18 bendiciones en las que se enumeraban las diferentes categorías sociales de personas y de intenciones por las cuales se oraba. San Pablo, en la carta a Timoteo (2, 1-2) hace alusión a esta costumbre. También entre los paganos existía ya más o menos esta forma de plegaria.
En los escritos de los primeros Padres de la Iglesia encontramos ejemplos de este tipo de oración, como se puede ver en la oración de San Clemente Romano o en la carta de San Policarpo y en las actas de su martirio.
El texto más antiguo conocido de letanías a la Virgen (como un cuerpo orgánico parecido al actual) es el contenido en un Misal de Maguncia del s. XII, aunque existieron en el transcurso de los siglos varias recensiones. El que actualmente se practica, de ordinario al final del Santo Rosario, fue adoptado en el famoso santuario mariano de Loreto, de donde procede el nombre con que se las conoce (Letanía Lauretanas). Fue el papa Sixto V quien las aprobó para toda la Iglesia, en 1587.
Existen otras letanías, como son las de los Santos, la del Sagrado Corazón de Jesús, del Santísimo Nombre de Jesús, de San José, etc. Todas revisten el carácter fundamental de ser oraciones de súplica e intercesión.
En cuanto a la explicación de estas letanías: '
Torre de David' aplica a la Virgen el Salmo 66, y hace referencia a la Fortaleza o Castillo del Rey David. La Virgen es para nosotros un lugar de refugio y protección, como un castillo fuerte.
'Torre de Marfil' es una imagen poética que aparece en el Cantar de los Cantares; hace referencia a la belleza femenina de la Virgen.
Casa de Oro' o Palacio de Oro, igualmente hace referencia a la belleza y riqueza de virtudes de la Virgen
'Estrella de la mañana' porque es la Virgen es como el Lucero de la Aurora que antecede a Cristo.
En los escritos de los primeros Padres de la Iglesia encontramos ejemplos de este tipo de oración, como se puede ver en la oración de San Clemente Romano o en la carta de San Policarpo y en las actas de su martirio.
El texto más antiguo conocido de letanías a la Virgen (como un cuerpo orgánico parecido al actual) es el contenido en un Misal de Maguncia del s. XII, aunque existieron en el transcurso de los siglos varias recensiones. El que actualmente se practica, de ordinario al final del Santo Rosario, fue adoptado en el famoso santuario mariano de Loreto, de donde procede el nombre con que se las conoce (Letanía Lauretanas). Fue el papa Sixto V quien las aprobó para toda la Iglesia, en 1587.
Existen otras letanías, como son las de los Santos, la del Sagrado Corazón de Jesús, del Santísimo Nombre de Jesús, de San José, etc. Todas revisten el carácter fundamental de ser oraciones de súplica e intercesión.
En cuanto a la explicación de estas letanías: '
Torre de David' aplica a la Virgen el Salmo 66, y hace referencia a la Fortaleza o Castillo del Rey David. La Virgen es para nosotros un lugar de refugio y protección, como un castillo fuerte.
'Torre de Marfil' es una imagen poética que aparece en el Cantar de los Cantares; hace referencia a la belleza femenina de la Virgen.
Casa de Oro' o Palacio de Oro, igualmente hace referencia a la belleza y riqueza de virtudes de la Virgen
'Estrella de la mañana' porque es la Virgen es como el Lucero de la Aurora que antecede a Cristo.