Sobre el tema que expone, básicamente las anécdotas de las que tengo conocimiento hablan más de una maldición que de un don debido a que la proyección del magnetismo personal a través de la mirada es del tipo de armas de doble filo que bien puede causar más desgracias que beneficios si quien posee esta condición carece de la mansedumbre y pureza de los sentimientos. Para ser preciso, este dicho popular de quienes tienen "caballito" y causan el mal de ojo capaz de matar animales y criaturas frágiles (humanas) y que algunos usan conscientemente (en hechicería) y otros inconscientemente (lo más común) y que causan toda clase de pesares a las victimas.
Comenta Hercilio Maes, médium que trabajó mucho con Ramatís en su tiempo, que conoció a una persona cuya potencia en la mirada era tal que para probar hasta dónde llegaba, las personas se entretenían haciendo que esa persona mirase a un animal y este al día siguiente apático, apenas se sostenía y luego moría. Esto no fue bueno nunca para esa persona, que la sufría, y las personas llegaron a temerle al punto de huir de él; cerraban las ventanas y procuraban no coincidir con él para que no sucedieran desgracias en su vida y al final este hombre se suicidó. El trasfondo de esto es que ese hombre había cultivado un magnetismo maligno en anterior existencia y ahora, siendo un alma completamente diferente, aún albergaba la condensación de las malas energías que adquirió en su pasado de impureza por su mala índole, y no pudo huir de la consecuencia de aquello que causó.
Aquí en la localidad hay una mujer que tiene esa fama y ni sus hijos se han salvado de eso, esas criaturas sobreviven en agonía por culpa de su propia madre y a más de uno, a lo largo de muchos años, los ha orillado a la muerte sin intención por eso le han prohibido que se acerque a las criaturas frágiles pero como ahora es evangélica, reparte su veneno suponiendo que eso es cuento de camino mientras que presiona a los padres de esas criaturas a correr de emergencia a resguardar a sus hijos cuando en tiempo récord los andan arrastrando al otro lado.
Pueden consultar el capítulo X del libro Magia de Redención de Ramatís conjunto a Hercilio Maes, ese se titula "mal de ojo" y desglosa los aspectos del magnetismo mal sano proveniente de Espíritus que han sido o contienen mucho veneno en el interior de sus almas y por consecuencia, proyectan a través de su magnetismo, por el verbo, por la mirada, por el puro pensamiento una energía que es veneno puro hacia los ambientes y los seres vivos los cuales sucumben con facilidad ante un fluido tan destructivo. La maldición que poseen los que causan el mal de ojo porque tienen la mirada fuerte es la de la hechicería, basado en que para producirse este, los mismos factores que condicionan al hechicero para causar daño deben existir. En otros términos, es un hechicero (usando esta palabra en su acepción maligna).
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«Aparte del Espíritu protector ¿está unido un mal Espíritu a cada individuo, con miras a incitarlo al mal y darle ocasión de luchar entre el bien y el mal?
- "Unido" no es la palabra exacta. Bien es verdad que los malos Espíritus tratan de desviar del camino recto al hombre cuando se les presenta la oportunidad: pero si uno de ellos se apega a un individuo, lo hace por determinación propia, porque espera que el hombre le haga caso. Entonces se desarrolla una lucha entre el bueno y el malo, y la victoria corresponderá a aquel cuyo dominio el individuo entregue»
Libro de los Espíritus, cuestión 511.