Buenos días a todos los miembros de este grupo. Traigo este texto, tomado de el libro LA PIPA SAGRADA, en espera que sea de interés, puesto que no hay manera de poder subir un documento de archivo. Buscando siempre ampliar conocimiento y entender el por qué de los ritos

LA PIPA SAGRADA


LOS SIETE RITOS SECRETOS DE LOS INDIOS SIOUX

relatados por

ALCE NEGRO
En la gran visión que me sobrevino en el alba de mi vida, cuando había conocido apenas nueve inviernos, había algo cuya importancia se me ha ido revelando a medida que las lunas pasaban. Quiero hablar de nuestra Pipa sagrada y de lo que significa para nuestro pueblo.

Los hombres blancos, al menos los que son cristianos, nos han dicho que Dios envió a su Hijo a los hombres para restablecer el orden y la paz en la tierra; y nos han dicho que Jesucristo fue crucificado, pero que debe regresar el día del Juicio final, que será el fin de este mundo o ciclo. Yo sé y comprendo que esto es cierto; pero que los hombres blancos sepan que, también para los pieles rojas, por la voluntad de Wakan-Tanka, el Gran Espíritu, un animal se transformó en bípedo para traer la Pipa muy santa a su pueblo; y sabemos, también, que esta Mujer Bisonte Blanco que trajo nuestra Pipa sagrada aparecerá de nuevo al final de este mundo, acontecimiento que nosotros, los indios, sabemos que no está ya muy lejano.

La mayoría de las personas llaman a nuestro Calumet «Pipa de la paz», pero en nuestros días ya no hay paz en la tierra, ni siquiera entre vecinos, y sé que esto es así desde hace mucho tiempo. Se habla mucho sobre la paz, pero no se trata más que de discursos.

Es posible, y ésta es mi plegaria, que por nuestra Pipa sagrada, y gracias a este libro en el que explicaré qué es realmente nuestra Pipa, la paz venga a los que son capaces de comprender; esta comprensión debe venir del corazón y no únicamente de la cabeza. Aquéllos se darán cuenta de que nosotros, los indios, conocemos al único Dios verdadero y le rogamos constantemente.

He dictado este libro sin otro deseo que el de ayudar a mi pueblo a darse cuenta de la grandeza y la verdad de nuestra propia tradición, y también para facilitar la venida de la paz a la tierra, no sólo entre los hombres, sino en ellos y con toda la Creación.

Debemos comprender que todas las cosas son obra del Gran Espíritu. Debemos saber que Él está en toda cosa: en los árboles, en las hierbas, en los ríos, en las montañas, y en todos los cuadrúpedos y los pueblos alados; y, lo que es aún más importante, debemos comprender que Él es también más allá de todas estas cosas y de todos estos seres. Cuando hayamos comprendido todo esto profundamente en nuestros corazones, temere-mos, amaremos y conoceremos al Gran Espíritu; entonces nos esforzaremos para ser, actuar y vivir como Él quiere.
HEHAKA SAPA (ALCE N EGRO)

Manderson, S. D., diciembre de 1947

Muchos inviernos han pasado desde que esto sucedió: dos lakotas habían salido de caza y estaban al acecho sobre una colina; entonces vieron a lo lejos, en el mismo instan-te en que salía el sol, algo que avanzaba en su dirección de un modo extraño y maravillo-so. Cuando se hubo aproximado, vieron que era una mujer muy bella, vestida con blancas pieles de gamo, y que llevaba sobre la espalda una bolsa con flecos. Entonces uno de los hombres tuvo pensamientos impuros y se los comunicó a su amigo; pero éste le dijo que no tuviera tales pensamientos, pues seguramente aquélla era una mujer wakan, una mujer sagrada. Pronto esta mujer estuvo cerca; y después de soltar su bolsa, pidió al que tenía intenciones impuras que se acercara a ella. Cuando el joven se aproximó a la mujer misteriosa, una gran nube les envolvió a los dos, y cuando, poco después, se disipó, la mujer seguía de pie y en el suelo yacía el hombre malo reducido a la condición de un esqueleto, y unas serpientes le roían. La mujer dijo entonces al otro, al hombre bueno: «¡Considera eso que ves! Voy al encuentro de tu pueblo y deseo hablar a tu jefe Hehlog-hecha Najin, Cuerno Hueco De Pie. Regresa junto a él y dile que prepare una tienda espaciosa en la que reunirá a todo su pueblo y preparará mi llegada. Quiero deciros algo muy importante.»

El joven acudió en seguida a la tienda de su jefe y le narró todo lo sucedido, que esta mujer misteriosa venía a rendirle visita y que había que preparar su recepción.

El jefe Cuerno Hueco De Pie disponía en aquella época de varias tiendas desmontadas, y mandó hacer con ellas una grande, tal como había pedido la mujer. Luego envió

un pregonero a avisar a la gente que debían ponerse sus mejores vestidos de ante y re-unirse sin tardar en la tienda. Todos estaban muy intrigados mientras aguardaban en la vasta tienda la llegada de la mujer celeste, y todos se preguntaban qué podría querer confiarles.

Pronto los jóvenes que vigilaban la llegada de la desconocida anunciaron que la percibían a lo lejos, aproximándose hacia ellos con gracia y dignidad; y de repente la mujer misteriosa entró en la tienda y le dio la vuelta en el sentido del movimiento del sol, y luego se detuvo ante Cuerno Hueco De Pie. Cogió la bolsa de su espalda y, sosteniendo-la con las dos manos delante del jefe, le dijo:

«¡Contempla esto y ámalo siempre! Es una cosa muy sagrada —lilla wakan—, y debéis siempre considerarla como tal. Nunca un hombre impuro deberá ser autorizado a verla, pues en este paquete se encuentra una Pipa sagrada. Con ella, en los inviernos futuros, enviaréis vuestra voz a Wakan-Tanka, vuestro Abuelo y Padre»8.

Después de hablar así, la mujer celeste sacó de la bolsa un Calumet, así como una piedrecita redonda que depositó en el suelo. Dirigiendo la Pipa, por el cañón, hacia el cielo, dijo:

«Con esta Pipa de misterio caminaréis por la Tierra; pues la Tierra es vuestra Abuela y Madre y es sagrada. Cada paso dado sobre ella debería ser como una plegaria. La cazoleta de esta Pipa es de piedra roja; es la Tierra. Este bisonte joven que está grabado en la piedra, y que mira hacia el centro, representa a los cuadrúpedos que viven sobre vuestra Madre. El cañón de la Pipa es de madera, y esto representa todo lo que crece sobre la Tierra. Y estas doce plumas que cuelgan de donde el cañón penetra en la cazoleta son de Wambali Galeshka, el Águila Moteada, y representan al Águila y a todos los seres alados del aire. Todos estos pueblos, y todas las cosas del Universo, están vincula-das a ti, que fumas la Pipa; todos envían sus voces a Wakan-Tanka, el Gran Espíritu. Cuando oráis con esta Pipa, oráis por todas las cosas y con ellas.»

La mujer celeste tocó entonces con el extremo de la Pipa la piedra redonda puesta en el suelo, y dijo:

«Con esta Pipa estaréis unidos a todos vuestros antepasados: vuestro Abuelo y Padre, vuestra Abuela y Madre. Vuestro Padre Wakan-Tanka también os hace don de este guijarro redondo que está hecho de la misma piedra roja que la cazoleta de la Pipa. Es la Tierra, vuestra Abuela y Madre, y es el lugar donde viviréis y creceréis. Esta Tierra que Él os ha dado es roja, y los hombres que viven en ella son rojos; y el Gran Espíritu os ha
dado también un día rojo y un camino rojo. Son venerables; no lo olvidéis. Cada aurora que llega es un acontecimiento sagrado, y todos los días son sagrados, pues la luz viene de vuestro Padre Wakan-Tanka; y debéis también acordaros siempre que los hombres y todos los demás seres que están en esta Tierra son sagrados y deben ser tratados como tales.

Desde ahora la Pipa de misterio estará en esta Tierra roja, y los hombres tomarán la Pipa y enviarán sus voces al Gran Espíritu. Estos siete círculos que ves en la piedra significan muchas cosas, pues representan los siete ritos según los cuales se utilizará la Pipa. El primer gran círculo representa el primer rito que voy a transmitiros, y los otros seis círculos representan los ritos que os serán revelados directamente, a su debido tiempo. Cuerno Hueco De Pie, sé bueno respecto a estos dones y para con tu pueblo, pues son sagrados. Con esta Pipa, los hombres prosperarán y todo bien vendrá a ellos. Desde lo alto, el Gran Espíritu os ha dado esta Pipa a fin de que, gracias a ella, pudierais obtener el conocimiento. ¡Estad siempre agradecidos por este gran don! Ahora, antes de que me vaya, deseo darte instrucciones sobre el primer rito con el cual tu pueblo deberá utilizar esta Pipa.

¡Qué para ti sea sagrado el día en que uno de los tuyos muera! Deberás entonces guardar su alma como voy a explicarte, y así ganarás mucho en poder, pues cada alma

fortalecerá tu abnegación y tu amor hacia tu prójimo. Mientras uno de los vuestros permanezca con su alma junto a tu pueblo, estaréis en condiciones de enviar vuestra voz al Gran Espíritu a través de ella.
Que sea igualmente sagrado el día en que un alma se libere y regrese a su morada, que es Wakan-Tanka; pues aquel día cuatro mujeres serán santificadas y con el tiempo traerán hijos que caminarán por el sendero de la vida según el misterio, dando ejemplo a tu pueblo. Mírame, pues soy yo lo que llevarán a su boca, y gracias a esto se convertirán en santos.

El hombre que guarda el alma de una persona debe ser virtuoso y puro, y debe servir-se de la Pipa para que todos, con el alma, envíen juntos sus voces al Gran Espíritu. El fruto de vuestra Madre Tierra, y el fruto de todo lo que lleva, serán así benditos, y tu pueblo marchará entonces según el misterio por el camino de la vida. No olvidéis que el Gran Espíritu nos ha dado siete días para enviarle vuestra voz. Mientras os acordéis de esto, viviréis. El resto os será revelado por el Gran Espíritu.»

Entonces la mujer celeste se adelantó para salir de la tienda, pero volviéndose de nuevo hacia Cuerno Hueco De Pie, dijo:

«¡Mira esta Pipa! Acuérdate siempre de cuan venerable es, y trátala en consecuencia, pues ella te guiará hacia tu meta. ¡Acuérdate! En mí hay cuatro edades. Ahora me voy, pero velaré por tu pueblo durante cada una de estas edades y, al final, regresaré.»

Después de dar la vuelta a la tienda siguiendo el movimiento del sol, la mujer misteriosa salió; pero, a una corta distancia, se volvió hacia el pueblo y se sentó. Cuando se levantó, los hombres vieron con sorpresa que se había transformado en un joven bisonte
rojo y castaño. Entonces este joven bisonte, después de alejarse todavía un poco, se tendió y se revolcó, y miró hacia el pueblo; y cuando se levantó de nuevo, era un bisonte blanco. Se alejó y se revolcó por el suelo, y se convirtió en un bisonte negro, que volvió a alejarse, se inclinó ante cada una de las cuatro Regiones del Universo, y desapareció detrás de la colina.