Saludos y bendiciones.
No es mucha la información pero me gustaría que complementen con la que tengan.
MARACAY
Cacique de cuerpo hercúleo, energía impresionante y de aspecto desagradable con la fiereza dibujada en el rostro, perteneciente a la tribu de los Araguas. Usaba un penacho de plumas multicolores. Se adornaba el cuerpo con ajorcas recamadas con metales bruñidos y piedras preciosas - tal vez como una forma de ostentación o para ocultar su fealdad -.
Su nombre sirvió para designar a otra tribu descendiente de la cual él era originario. Dominó en todo lo conocido como hoy Estado Aragua con algunas zonas colindantes como el sector perteneciente al cacique Turiamo. Este cacique estuvo aliado en muchas ocasiones con Maracay.
Su fama comienza cuando logra derrotar las huestes de Rodríguez Suárez. El duelo entre invasor e invadido le dio el triunfo a Maracay. Rodríguez y su gente tuvieron que retirarse vencidos por el guerrero. Lograron quitarle la vida mientras descansaba, como consecuencia de una traición de uno de sus guerreros (Gómez, 1996: 65-66).
Saludos y bendiciones.
No es mucha la información pero me gustaría que complementen con la que tengan.
MARACAY
Cacique de cuerpo hercúleo, energía impresionante y de aspecto desagradable con la fiereza dibujada en el rostro, perteneciente a la tribu de los Araguas. Usaba un penacho de plumas multicolores. Se adornaba el cuerpo con ajorcas recamadas con metales bruñidos y piedras preciosas - tal vez como una forma de ostentación o para ocultar su fealdad -.
Su nombre sirvió para designar a otra tribu descendiente de la cual él era originario. Dominó en todo lo conocido como hoy Estado Aragua con algunas zonas colindantes como el sector perteneciente al cacique Turiamo. Este cacique estuvo aliado en muchas ocasiones con Maracay.
Su fama comienza cuando logra derrotar las huestes de Rodríguez Suárez. El duelo entre invasor e invadido le dio el triunfo a Maracay. Rodríguez y su gente tuvieron que retirarse vencidos por el guerrero. Lograron quitarle la vida mientras descansaba, como consecuencia de una traición de uno de sus guerreros (Gómez, 1996: 65-66).
Saludos y bendiciones.