Feliz, abundante y provechoso año 2017 para todos,

Esto es Psicología hermanos, no Metafísica

¿Te atreves a desafiar tus creencias ? (sistema de creencias, estructura mental) 15578823_1800958266829889_1266703790962356976_n

Hablar de sistemas de creencias es hablar de un punto de vista, un enfoque (no una verdad) para tratar de entender a la gente.
Los sistemas de creencias son aquellas cosas que damos por ciertas y jamás se nos ocurriría criticarlas o cuestionarlas, son como nuestra verdad interna.

Podemos poner como ejemplo la comida:
-A nosotros jamás se nos ocurriría hacer un asado de perro, pero en China sus patitas son una delicia.
-Hay personas que por cuestiones religiosas no comen cerdo o vaca.

Como ejemplo el concepto de belleza:
-Muchos niños y adolescentes sufren trastornos alimenticios por culpa de lo que creen que es bello.

Nuestro sistema de creencias puede venir de la tradición, la religión, la moda, etc.
Cuando nuestras creencias son atacadas o criticadas, inmediatamente nos ponemos a la defensiva, ¿que pasa si las cosas en las que creímos toda la vida están mal?

Para llevarlo a otro  ámbito podemos poner por ejemplo:
-Es imposible que el alma no exista
-La vida tiene que tener un sentido
-No puede ser que  la vida se termine con la muerte

Hay personas que así lo sienten, es su verdad interna y no existe argumento que los haga cambiar de opinión.
Estos pensamientos son como nuestro software elemental y en base a ellos construimos otros pensamientos.

A lo largo de la vida, vamos acumulando experiencias y creencias sobre como son, o como deberían ser las cosas. Son “nuestras verdades” y de acuerdo a ellas es la forma en que nos desenvolvemos en los diferentes casos que se nos van presentando.

Las otras personas también tienen sus verdades, algunas de ellas han vivido situaciones similares a las nuestras, otros individuos han tenido vivencias opuestas. Entonces, cual es la verdad? donde  está el limite  o cual es la mejor forma de actuar?

Las creencias no se basan en un sistema de ideas lógicas. Su función no es coincidir con la realidad. Recuerden que la mente no sabe lo que es real y lo que no es real, sino que nosotros le decimos e implantamos las creencias que forman una parte esencial de nuestra estructura mental. Por lo tanto las creencias funcionan como la fe; no hay un sustento concreto que las compruebe, son generalizaciones mentales a las cuales les damos el poder de convertir en realidad lo que no se ve. Las creencias se pueden instalar por medio del aprendizaje o por alguna vivencia.

Cuando tenemos una creencia instalada, actuamos como si fuera verdad y eso nos da mucha fuerza para sacar los recursos necesarios para llevarla a cabo y así comprobamos nuestra creencia.

Detrás de cada una de nuestras estructuras mentales, hay una creencia. Algunos ejemplos cotidianos y muy sencillos son: te lavas los dientes porque crees que es bueno; fumas porque crees que te tranquiliza; tomas un café porque crees que te despierta; no tomas vino tinto porque crees que te da dolor de cabeza (si así fuera, toda Europa tendría dolor de cabeza). Nuestras creencias varían en intensidad y nuestras creencias dan sentido a nuestro mundo y nuestra forma de ser porque son ellas las que nos motivan (y también nos desmotivan, si son limitantes).

¿Cómo se instala una creencia?

Cuando nos desarrollamos en el mundo, desde chiquitos filtramos lo que vemos, lo que escuchamos y lo que sentimos hacia nuestra memoria y hacia nuestro inconsciente. Filtramos cada evento de una forma especial y los reproducimos también de una forma especial. Reproducimos la información según nuestros filtros que están basados en nuestros sentidos y experiencias. Un bebé no tiene grandes experiencias, por lo tanto filtra principalmente a través de los sentidos y las empieza a grabar y a acumular las creencias de sus padres, en una forma específica para él.

¿Cuándo escuchaste la palabra catarro por primera vez? ¿No te acuerdas? Seguramente porque fue a temprana edad. De chiquito te dijeron:

Si te mojas te da catarro
Si no te pones el sweater, te da catarro
Si te da una corriente de aire, te da catarro
Si saludas a alguien con catarro, te da catarro
Si andas descalzo, te da catarro.etc. etc....

En primera instancia como niño no le dimos crédito a la predicción de mamá, sin embargo, un día que estaba descalzo, efectivamente me dio catarro y mi mente lo grabó. Comprobamos que en realidad sucede y entonces la convertimos en una creencia. Y luego quizá también me sucedió que cuando me enfrío, me da catarro. Yo no recuerdo cuando se instaló esta información, yo simplemente tengo esa información en mi inconsciente y funciono de acuerdo a ella.

Se repite el mensaje, se repite el mensaje, un día se me concede, me lo creo, lo grabo y lo convierto en mi realidad y mi verdad. Es mi ley. Y mi ley siempre funciona y está a mi disposición.

Las creencias las construimos todo el tiempo y también las modificamos. Por ejemplo la creencia de que Santa Claus existe, seguramente ya la cambiamos. Estaríamos mal si no pudiéramos cambiar creencias. Algunos pensarán que es malo andar descalzo y que se enferman, otros pensarán que no sólo es agradable andar descalzo, y lo disfrutan, sino que además ya rompieron con la creencia negativa.

Las creencias se convierten en verdades. Las creencias de salud son muy fuertes y funcionan por la fuerza que les otorgamos. Si mi mamá sufrió de migrañas, yo seguramente también las tendré, si mi papá fue calvo, ese es mi destino, a los cuarenta necesitaré anteojos inevitablemente igual que mi madre, etc. Actuamos como si fuera verdad y por eso se manifiestan estos síntomas.

Hay experimentos médicos publicados en los que se usaron placebos con un grupo de pacientes y medicamentos reales con otro grupo. Al grupo de los placebos se les dijo que era el último grito de la ciencia y lo mejor que había en la actualidad. Los resultados fueron asombrosos, el grupo con placebos mejoró considerablemente en comparación el grupo que tomó los medicamentos reales y que no se le dijo nada espectacular del medicamento, ni de la mejoría. Este es un ejemplo de las creencias en acción.

Otro experimento que también está registrado fue con enfermos de cáncer. A un grupo se le dio quimioterapia normal y al otro quimioterapia con placebos. Los dos grupos perdieron el cabello. Es otra prueba de la fuerza de las creencias.

Cada quien tiene su sistema de creencias. Creencias con respecto a la familia, con respecto al trabajo, la salud, la alimentación, el sueño, la herencia, etc.. Las creencias positivas son permisos que actúan sobre nuestras capacidades. Las creencias negativas o limitativas nos frenan y no encontramos las capacidades.

Ya saben lo que dicen: "Si crees que puedes, puedes y crees que no puedes, no podrás." Así de sencillo.

Fuente: complilación de las Web: Taringa.com, Enplenitud.com y yahoo.mx.

Dulces sueños, recuerden "Querer, en este caso creer, es poder !!" , Meredith flower