LEMURIA:

En tiempos muy lejanos que ya ni se recuerdan, existió un maravilloso continente llamado “Lemuria”. Este nombre deriva de “Kremuria”, palabra que significa “tierra quemada”, debido a que allí había muchos volcanes y también bastante terreno procedente del enfriamiento de la lava volcánica.

Aproximadamente 60.000 años, Lemuria, fue en donde el Mesías encarnó dos veces como Juno el marino y Numú el Pastor.

Lemuria, pasó por sucesivas transmutaciones que fueron hundiendo parcialmente su territorio, como consecuencia de cataclismos geológicos a lo largo del tiempo. Por ello, iban desapareciendo las llanuras, los valles, y solo quedaban islas, mesetas, correspondientes a las partes altas de las montañas. a medida que estas transmutaciones sucedían, los habitantes de esos territorios huían hacia el Sur de Asia en busca de refugio. Por temor a las inundaciones, elegían lugares altos, montañosos como el Himalaya.

Para los Lemures, el principio del Fuego Eterno Creador, era lo que ahora llamamos “Dios”, el Alma Mater, la Llama Viva. Por ello, recibieron el nombre de “Flámenes” (flama o llama) los integrantes de una gran agrupación espiritual continuadora de la enseñanza de Numú, formada después que él desencarnó. Tenían como símbolos especiales el cordero, la cruz, la estrella de cinco puntas y un lema parecido al que posteriormente representaba a los antiguos Kobdas: “Con tu fuego, tu luz interior, purifica y embellece todo tu alrededor”. Extraer el fondo de las cosas lo mejor que hay en ellas, decían los Kobdas que llamaban a sus santuarios “Casa de Numú”.

La capital de Lemuria, era la ciudad de Mirt ain mare, nombre que significa “mirando al mar” por estar situada junto a la costa. Era un magnífico palacio de esa ciudad, nació Vesperina, hija del rey, enamorada de Numú, con quién se casó bajo en consentimiento de su padre. Había allí grandes avenidas pavimentadas en piedra azul y roja, enormes pirámides, ciclópeas edificaciones y casas para el pueblo construidas en la roca viva por medio de excavaciones subterráneas. Las fachadas estaban decoradas con estatuas gigantescas y bellas, columnas talladas en la misma piedra. Los hogares de os mineros, del pueblo en general eran cavernas perfectamente acondicionadas para vivir, según la costumbre de aquellos tiempos.

En Lemuria, se desarrolló una avanzada civilización, la segunda Edad Dorada, que duró varios milenios, pero, por el mal uso del Poder Divino y la incorrecta utilización del libre albedrio, por dar la entrada a lo psíquico principalmente, el continente cayó en degeneración y decadencia. Varios cataclismos geológicos (terremotos, maremoto y volcanes) lo hundieron definitivamente en el mar. El último país que sobrevivió se llamó Pas quam lik.


AE/pch.

_________________
"Que el Gran AMOR Infinito de el DIOS UNO Padre-Madre te envuelvan en la Suprema LUZ Divina. "