Los 4 Reyes son cartas que tienen en el Tarot un simbolismo de hombres de alta jerarquía y gran poder, o alta influencia en la familia o negocio.
Simbolismo del Rey en la baraja
Los Reyes desempeñan funciones de autoridad en el contexto que se esté consultando. De ese modo puede indicar la presencia de un hombre poderoso, amigo adulto, jefe, profesor, empresario o funcionario de alto nivel. Siempre serán hombres maduros o ancianos y sus atributos estarán vinculados a los correspondientes al elemento que representan.

Puede ser el padre, esposo o consejero. Si aparece en la posición del consultante y éste es masculino, indica sus características. De tratarse de una mujer, destaca su energía Yang. En estos tiempos, en que las mujeres desempeñan roles que eran antiguamente característicos de los hombres, suelen aparecer reyes para designar funciones y condiciones de mujeres fuertes, sin que ello signifique sean masculinas.

Señala decisión, liderazgo, poder ejercido con firmeza y actitud Yang. En el entorno de la persona (en el ambiente, condiciones a favor, en contra, lo que piensa la persona, etc.) un rey derecho señala a un benefactor, un guía, consejero o jefe, el padre o el esposo amoroso y solidario. De aparecer invertido, un enemigo poderoso, un hombre de autoridad que se opone a los planes de quien consulta o entorpece sus metas.

Rey de Bastos
El rey domina desde su trono decorado con leones (nobleza, liderazgo) y salamandras que se muerden la cola. La salamandra, símbolo de fuego, en este caso señala logros, ciclo cerrado. El león también es símbolo de fuego y actividad permanente. Aunque el Rey está sentado, su actitud es de alerta, su aspecto seguro y parece estar dispuesto a ponerse de pie en cualquier momento. Él muestra autoridad para realizar proyectos.

Significado general: padre o gerente. Jefe o líder. Amigo influyente, poderoso. Personalidad, magnética y atractiva. Empresa sólida. Madurez, seriedad. Vence todos lo obstáculos con perseverancia y disposición. Inspira a los demás mediante su ejemplo, fuerza de voluntad, optimismo y capacidad de trabajo.
Tendencia a impulsar y convencer a otros en la dirección de sus planes. Sincero por naturaleza, expresa sus opiniones con franqueza y a veces en forma temeraria. Gerente confiable y bien intencionado. Motiva a sus colaboradores. Padre diligente y entusiasta. En el plano de las relaciones de pareja, es sensual, y sexual, y bastante directivo.
Invertida: violencia, agresividad. Adversario obstinado. Déspota, autoritario, aventurero inescrupuloso. Ira, maltrato. Sexualmente irresponsable. Fanfarronería. Es difícil "seguirle el paso", en el trabajo su actividad es exagerada al punto que agota a quienes trabajen con él. Puede ser intolerante y generan tensiones permanentes en su entorno. Desconsiderado con quienes le rodean, es egocéntrico y tiende a abusar de sus colaboradores y subalternos. En su desmedida auto imagen tiende a la fanfarronería, descalifica y subestima al otro. Exceso de control. Ambiente de oposición y conflicto. Estrés, agotamiento por sobre exigencia.
Rey de Oros
Rodeado de riqueza y abundancia, el Rey de Oros dirige magnánimo desde su trono. Ve los frutos de sus esfuerzos: el castillo, en cuya almena se encuentra instalado, y la exuberante vegetación a su alrededor. La capa real está estampada de múltiples racimos de uva, símbolo de prosperidad.

Su trono, suntuosamente tallado, lo relaciona con la abundancia de la naturaleza, los frutos de la tierra y el signo de Tauro, el trabajador constante y paciente, quien disfruta de los placeres de la vida y avanza siempre hacia el éxito y la concreción de los planes.

Significado general: valor, inteligencia, riqueza, éxito material. Mente analítica. Razonamiento concreto. Padre, dirigente, líder en asuntos de negocios. Quien sabe manejar el poder del dinero. Un hombre rodeado de confort y bienestar, adinerado o empapado en temas de finanzas e inversiones. Paciente y trabajador. Él es un jefe experimentado y un aliado de confianza. Máxima autoridad en su campo. Administra, dirige, preside, planifica y organiza. Leal y paciente con quienes ama, implacable con los enemigos. Empresario, comerciante próspero, socio capitalista. Padre generoso y diligente. Se preocupa por el bienestar de todos y provee en abundancia. Es una figura de autoridad coherente y estable. Sus fuertes convicciones y la claridad de sus pensamientos le aseguran el éxito en cualquier empresa, ya sea profesional, personal, espiritual o material.
Invertida: dictadura, tiranía. Pobreza de espíritu. Gusto vulgar y mediocre. Tacaño, miserable, mezquino, dogmático. Explotador. Representa los anti-valores dirigidos a la consecución del poder y la riqueza: corrupción, deshonestidad, ocultación de los verdaderos motivos. Puede ser un hombre vicioso y avaro, con tendencia al juego y la especulación. Utiliza las cuotas de poder a su alcance para obtener beneficios aun a costa del bienestar o la felicidad de los demás. Acompañado del arcano XV El Diablo, se ve vinculado a mafias y círculos de corrupción. Las metas materiales son prioritarias para este rey de tendencia mezquina y cruel. En el amor, matrimonio por interés económico o para consolidar su posición mediante influencias familiares. Con cartas de pobreza y pérdidas, actos desesperados para recuperar la posición perdida.
Rey de Espadas
El Rey eleva la espada de la justicia con gesto firme y decidido. Dos aves vuelan juntas en un cielo apacible, para señalar la capacidad de Rey de Espadas para armonizar con los demás, negociar, ponerse en el lugar del otro y compartir.

Su mirada franca, frontal denota sinceridad, capacidad de diálogo. No obstante, su gesto adusto también advierte que puede ser implacable en el cumplimiento de lo que él considera justo.

Significado general: abogado, juez o magistrado. Supervisor, planificador, estratega, sentido común. Sabe aprovechar sus recursos. El Rey de Espadas es equilibrado, justo y moderado. Gusto por las letras y la filosofía. Experto en su área dispuesto a compartir sus conocimientos. Aliado poderoso, consejero. Es inteligente, planificador y observador agudo. Maneja con justicia la autoridad de que está investido. Carácter ponderado y analítico. Puede parecer un poco frío y distante, pero es honesto y de principios. No se contenta con una primera versión de los hechos: razona, investiga, diagnostica, observa, analiza y define antes de asumir una posición y juzgar. Esta carta también puede indicar un juicio o aconsejar buscar asesoría legal.
Invertida: prejuicio, antagonismo, rivalidad, no llega a acuerdos. Juicio en contra. Cinismo, arrogancia, hipocresía, ambigüedad, fingimiento, engaño. Trampa legal. Su mente aguda y ágil le permite entender lo que otros no captan, ni imaginan. Analiza los hechos con sagacidad y capta las debilidades del adversario con rapidez y precisión. Cuando advierte un adversario no descansa hasta verlo neutralizado o vencido. Hombre engañoso y malicioso. Puede ser un enemigo peligroso, violento y poderoso. Puede indicar una injusticia, manipulación de la ley o pérdida de un juicio u otro asunto legal.
Rey de Copas
El rey tiene un aspecto maduro y su trono de piedra sólida parece flotar sobre las aguas movidas de sus emociones. Su aspecto adusto y seguro esconde un alma sensible. Sus ropas azules denotan un fuerte liderazgo moral y conexión con lo espiritual, mientras la pesada capa amarilla enfatiza su inteligencia, capacidad lógica, racional.

No obstante, el forro de la capa es rojo, como muestra de un intenso mundo emocional, sensual y apasionado que el rey modera con inteligencia, pues el amarillo prevalece. Así conserva el equilibrio sobre aguas turbulentas, corrientes encontradas entre las cuales se vislumbran tonalidades amarillas: su madurez le permite penetrar en las emociones con inteligencia. El Rey tiene la copa en su mano derecha (dominio sobre el elemento agua), y en la izquierda un cetro (símbolo de mando), cuya forma recuerda las columnas de la Suma Sacerdotisa, pues él es intuitivo y profundo.

Significado general: padre o esposo amoroso. Guía, consejero, de buenos sentimientos, fuertes y duraderos. Autoridad moral. Hombre profundo que, por una parte puede estar interesado en ciencia, arte, religión o filosofía, y por otra vive intensas corrientes emocionales que lo estremecen. Expresa sus pasiones y sentimientos, posee sensibilidad artística, gusto estético. Es idealista y creativo. Consejero experto, protector, afectuoso, respetuoso e idealista. Cuida de su familia. Empático y abierto a formar equipo. Sabe cuándo guiarse por su intuición, pero no desdeña el pensamiento racional, el orden y la disciplina.
Invertida: decadencia, excesos, vicios. Inestable, caprichoso. Hombre celoso, suspicaz, posesivo o sobre-protector. Indigno de confianza, mentiroso, despiadado. Es víctima de sus emociones. Se entusiasma fácilmente pero sin profundidad ni constancia. Puede caer en profundos conflictos emocionales, dualidades e indecisiones. Se deja arrastrar por su mundo pasional, con lo cual vive situaciones extremas, amor-odio, infidelidad y soledad. Es manipulador, vengativo. Está lleno de resentimientos. Tendencia a los excesos y a los vicios.