A continuación se presentan recetas muy útiles para mejorar la apariencia del rostro y el cuerpo, que ayudarán a destacar los puntos fuertes y ocultar los débiles y harán que se sienta radiante y renovada.

Las verdaderas brujas poco tienen que ver con aquella imagen temeraria de la mujer narigona y malhumorada que come niños. Éste es sólo un estigma más que la sociedad medieval se encargó de difundir para discriminar a las féminas con poderes muy especiales.

¡Qué gran contradicción sería encontrar una hechicera incapaz de embellecer con sus saberes mágicos hasta a la menos afortunada! E. Aquí encontrarán secretos de belleza que pertenecen a la exclusiva tradición Wicca. Pónganlos en práctica sin demora y prepárense a asombrarse con los resultados.

LIMPIEZA PROFUNDA

Imposible reflejar lo que no se tiene. Un plan de belleza debe comenzar por una limpieza que barra no sólo las impurezas superficiales, sino también las internas. Estas recetas harán que sus poros desborden luminosidad encantadora. Aplique cualquiera de los siguientes preparados una vez por semana. La primera vez que se efectúe esta limpieza, debe haber luna menguante.

Advertencia: Estas recetas tienen un efecto exfoliante de leve a moderado, por lo que no conviene aplicarlas todos los días ni, tampoco, sobre pieles irritadas.

Almendras doradas:

Coloque almendras peladas en un recipiente con agua hirviendo (o en una bolsita de polietileno para luego frotarlas). Deje secar y retire la piel. Luego, muela en molinillo de café o licuadora. Se obtiene así una harina que debe usarse mezclada con un poco de leche entera para masajear, suave y profundamente, cualquier parte del cuerpo durante 2 ó 3 minutos. Puede añadirle un poco de yogur natural para equilibrar el pH del cutis. Luego se retira con una toalla seca. Y se termina de limpiar la piel con agua mineral baja en sodio o una infusión de hierbas (ver Rocío de Luna).

Tierra poderosa:

Mezcle arcilla natural (se consigue en dietéticas o farmacias) con crema de leche o con gotitas de aceite de almendras. Se puede reemplazar la arcilla por azúcar o sal marina muy fina si desea hacer pulidos más profundos. La arcilla le aportará oligoelementos y, también, energías fecundas para lograr una belleza casi salvaje.

Máscara de Venus

Mezcle: 1 cucharada de arcilla, 1 de manzana rallada, 2 cucharaditas de yogur y 2 de avena. Aplique sobre rostro limpio, cuello y escote. Deje actuar durante 15 minutos. Retire y enjuague con agua. A continuación, deje secar y coloque compresas embebidas en infusión de caléndula o manzanilla para descongestionar (otros 15 min.). Mientras, tenga puesta la máscara, relájese y repita mentalmente: “Bruja nací, bella crecí, hechizo de Venus hay en mí”.

RITUALES CON AGUA

Baño de hierbas

Coloque, en el centro de una muselina, tul o gasa de 15 x 15 cm: 2 cucharadas de manzanilla, lavanda, flor de saúco o jazmín, 1 cucharada de menta y 2 cucharaditas de semillas de girasol trituradas. Cierre atando con un hilo. Sumerja la bolsita en1 litrode agua hirviendo, mientras recita en voz alta: “Cinco es la fuerza de la naturaleza, llegando al seis que es belleza; virtud del siete, liberen hierbas, todos sus poderes”. Deje reposar 15 minutos. Mientras tanto, llene con agua tibia una bañera previamente lavada con agua y bicarbonato de sodio. Vierta la infusión con la bolsita incluida. Luego, tome un baño de 15 minutos, plenamente relajada y disfrutando convencida de que sus poros absorberán todas las propiedades cosméticas de la mezcla mágica. Su cuerpo quedará renovado y terso.

Ducha energizante

Encienda dos velas con aroma a vainilla en el baño o en una habitación donde haya un espejo grande. Desnúdese frente al espejo e invoque a Afrodita, la diosa griega dela Belleza: “Diosa Afrodita, hermana bonita, vierte en mi piel el flujo de tu miel”. A continuación, frote suavemente su cuerpo con una toalla seca, blanca y bien limpia. Realice masajes circulares desde los pies hacia la cabeza. Después, ya dentro de la ducha y tal como lo hacían nuestras antecesoras cuando no había agua corriente, higienícese derramando sobre su cuerpo dos litros de agua mineral, previamente entibiada y mezclada con una taza de infusión de romero o milenrama y 7 gotitas de aceite de coco. Disfrute la caricia del agua. Enjuague zonas íntimas. Si hace calor, mejor, así podrá dejar que su cuerpo se seque mediante la evaporación. Mientras realiza este sencillo ritual con mucha concentración, placer y cuidado, mírese al espejo, y descubra en él el reflejo de su propio encanto. Repita: “Qué placer, transpira mi piel enigmática fragancia, seducida por mi cuerpo, a Adonis me entrego”.

Agua del cielo

Aproveche todas las oportunidades que tenga para juntar agua de lluvia. Luego de filtrarla para quitarle impurezas, úsela para lavar su cabello. También, para hacer las infusiones de uso cosmético. Nada más mágico que bañarse bajo la lluvia, lo ideal, si las circunstancias lo permiten, es hacerlo desnuda. Este líquido concentra en su forma más pura y fresca la energía de las fuerzas naturales en eclosión, por eso, su efecto es vigorizante y ayuda a potenciar un estilo de belleza silvestre o salvaje.

FÓRMULAS DE ENCANTO

Para este hechizo, aproveche las frutas y verduras de estación para aplicar pastas nutritivas y descongestivas directamente sobre la piel. Modo de uso: Puede usar estas cremas naturales luego de una limpieza mágica. Luego, retirar mediante la ducha energizante, el baño de hierbas o el agua de lluvia. Son ideales para usar sobre: rostro, escote, senos, codos, vientre y piernas. Advertencia: No aplicar cerca de los ojos.

Pasta de banana y miel

Mezcle banana pisada con miel. Recójase el pelo o utilice una gorra de baño para protegerlo. Cubra la piel con esta preparación reconstituyente y suavizante. Deje 15 minutos.

ENERGÍA VITAL

Este artilugio la ayudará a potenciar los efectos del plan de belleza mágica. El vientre y la pelvis albergan centros de energía vitales del cuerpo que ponen en circulación nuestras vibraciones cósmicas. Cuando estas zonas permanecen mucho tiempo quietas, bloquean nuestras energías y, también, el flujo sanguíneo y linfático. Esto repercute en un aspecto general poco saludable y débil, que envejece y afea. Ciertos movimientos estratégicos obrarán maravillas en la armonía de su cuerpo, ayudándolo a irradiar un halo de seducción y vitalidad. Lo más conveniente es hacer estos ejercicios frente a un espejo con el vientre descubierto, para tener un mayor control y concentración sobre los movimientos. Puede acompañar con una melodía de percusión, tambores, por ejemplo.

Posición A: De pie con las manos juntas delante del pecho, como si orara, mantenga el torso erguido y quieto. Los pies juntos, sin levantarlos del suelo. Las rodillas, levemente flexionadas. Mueva la pelvis dibujando una medialuna, primero hacia atrás y, luego, hacia delante. Concentre todo el movimiento allí.

Posición B: En la misma postura, lleve la pelvis hacia atrás sacando glúteos y vuelva a la posición inicial. Repita cinco veces. Ahora, haga lo mismo pero llevando pelvis hacia delante. Imagine que un eje vertical atraviesa su cuerpo, usted no debe salirse de ese eje en ningún momento.