Autor de más de 70 obras de gnosticismo universal, cientos de conferencias y fundador de las instituciones gnósticas modernas, aunque es necesario comprender que la Gnosis es tan antigua como lo es la humanidad.
La Gnosis es un funcionalismo muy natural de la conciencia, una "Philosophia perennis et universalis". (Libro: Doctrina Secreta de Anáhuac)
Así mismo se declaraba con un simple recadero, afirmando que el conocimiento (la Gnosis) es de carácter universal y cada ser humano la tiene en lo profundo de su conciencia. Su misión fue la de entregar una enseñanza que estuvo en la época de oro de las más antiguas culturas, como la egipcia, maya, inca, tibetana, azteca, etc.
"Un Mensajero o Avatara es, en síntesis, un recadero, es el hombre que entrega un recado, un servidor o siervo de la Gran Obra del Padre. Que esta palabra no se preste a equivocaciones, está especificada con entera claridad". (Samael Aun Weor)
Renunció a todos los derechos de autor en forma pública, para que los conocimientos pudieran llegar hasta el más humilde y promovió la difusión de la Gnosis en forma gratuita, desinteresada, a todo ser humano no importando su religión, cultura, nivel social, etc.
"Hoy por hoy mis queridos hermanos y por siempre, renuncio y he renunciado, y seguiré renunciando a los derechos de autor. ¡Lo único que deseo es que estos libros se vendan en forma barata, al alcance de los pobres, al alcance de todos los que sufren y lloran! ¡Que el más infeliz ciudadano pueda conseguir ese libro, con los pocos pesos que lleva entre su bolsa!" (Samael Aun Weor - Guadalajara, Mexico, 1976)
En variadas ocasiones insistió en que no se le rindiera culto a su personalidad y enfatizó la necesidad de seguir y vivir la enseñanza gnóstica y no seguir personas.
La enseñanza trasciende fronteras y nada tiene que ver con lugares geográficos y por supuesto es atemporal, más sin embargo estando tan acostumbrados mentalmente a ello anunciamos que su vehículo físico nace en Bogotá Colombia un 6 de marzo de 1917, aunque la mayor parte de su vida fue en México y deja se vehículo físico el 24 de diciembre de 1977.
Con grades sacrificios da forma al Movimiento Gnóstico a nivel internacional, viajando muchas veces a pie y sin ningún medio económico desde Colombia a México, dejando a su paso la semilla de la Gnosis en cada país donde transitaba.