NIVEL DE CONCIENCIA:
La evolución tiene avances progresivos, muy lentos y seguros. A lo largo de sucesivas reencarnaciones, cada individuo va ampliando su nivel de comprensión con la aceptación de verdades más altas, lo cual conduce al abandono de otras que quedaron atrás por pequeñas y limitadas; por lo tanto, ya no sirven.
El crecimiento espiritual interno se asemeja al corporal o físico en su esencia. A medida que el cuerpo crece en tamaño y fuerza, ya la ropa que usaba le queda pequeña. A la vez los gustos, costumbres y deseos también han cambiado. Igualmente, las personas las personas que amplían su nivel de conciencia se vuelven adultas espiritualmente, con criterios más firmes que se acercan más a la verdad. De esta manera, las personas se van liberando de sus limitaciones.
Superar el nivel de conciencia es como subir por una escalera. En cada peldaño, hay un avance mayor, mientras más alto se sube, mayor horizonte visual se percibe. Igualmente pasa al ir ascendiendo a una montaña. Desde arriba, se ve un paisaje amplísimo. De esta forma, las personas, vida tras vida van pasando por una y otra religión ascendiendo niveles de esoterismo, desechando creencias erradas. Poco a poco, el velo se va descorriendo a mayor nivel hasta que se desgarra del todo con la verdad absoluta. Entonces, ya llego el gran logro de la Ascensión. Con ello, no se alcanzó la cima, porque ha de seguir siendo ampliado el nivel de conciencia.
Hay que respetar el nivel de conciencia personal, porque mucho esfuerzo costó alcanzarlo y es algo muy valioso, de pertenencia privada. Comprensión, tolerancia y amor son la clave. Respeta para que te respeten, no caigas en fanatismos ni en discusiones. De esta manera, la vida será más armoniosa y pacífica. Recuerda que el nivel de conciencia personal ha costado mucho ir formándolo a través de bastantes reencarnaciones. Sea cual fuere esa comprensión acerca de la verdad espiritual, es una cosecha, un mérito propio por experiencias y constantes esfuerzos. Saber ver es la clave.
Maestro LANTO/AE/pch.
La evolución tiene avances progresivos, muy lentos y seguros. A lo largo de sucesivas reencarnaciones, cada individuo va ampliando su nivel de comprensión con la aceptación de verdades más altas, lo cual conduce al abandono de otras que quedaron atrás por pequeñas y limitadas; por lo tanto, ya no sirven.
El crecimiento espiritual interno se asemeja al corporal o físico en su esencia. A medida que el cuerpo crece en tamaño y fuerza, ya la ropa que usaba le queda pequeña. A la vez los gustos, costumbres y deseos también han cambiado. Igualmente, las personas las personas que amplían su nivel de conciencia se vuelven adultas espiritualmente, con criterios más firmes que se acercan más a la verdad. De esta manera, las personas se van liberando de sus limitaciones.
Superar el nivel de conciencia es como subir por una escalera. En cada peldaño, hay un avance mayor, mientras más alto se sube, mayor horizonte visual se percibe. Igualmente pasa al ir ascendiendo a una montaña. Desde arriba, se ve un paisaje amplísimo. De esta forma, las personas, vida tras vida van pasando por una y otra religión ascendiendo niveles de esoterismo, desechando creencias erradas. Poco a poco, el velo se va descorriendo a mayor nivel hasta que se desgarra del todo con la verdad absoluta. Entonces, ya llego el gran logro de la Ascensión. Con ello, no se alcanzó la cima, porque ha de seguir siendo ampliado el nivel de conciencia.
Hay que respetar el nivel de conciencia personal, porque mucho esfuerzo costó alcanzarlo y es algo muy valioso, de pertenencia privada. Comprensión, tolerancia y amor son la clave. Respeta para que te respeten, no caigas en fanatismos ni en discusiones. De esta manera, la vida será más armoniosa y pacífica. Recuerda que el nivel de conciencia personal ha costado mucho ir formándolo a través de bastantes reencarnaciones. Sea cual fuere esa comprensión acerca de la verdad espiritual, es una cosecha, un mérito propio por experiencias y constantes esfuerzos. Saber ver es la clave.
Maestro LANTO/AE/pch.