REBELDÍA:
La rebeldía es un acto de antagonismo, resistencia y protesta contra algo que no aceptamos y nos quieren imponer. El diccionario lo define como delito contra el orden público, cuando va más allá de la resistencia pasiva, por medio de acciones violentas de desorden de causan perturbación.
El Amado Maestro El Moría, dice en lo referente a la rebeldía de los adolescentes: “Ellos se expresan de esa forma por inconformidad hacia sus padres, a todo patrón de conducta impuesto por la sociedad de manera convencional. La esencia de ese cambio está que al cumplir catorce años, les corresponde ya salir de la obediencia y comenzar a tomar decisiones por sí mismos, sin embargo, la tendencia de querer liberarse y ser ellos mismos es canalizada en forma no correcta, como rebeldía hacia todo lo existente. Por ello, los jóvenes pueden ser manejados con facilidad, para alejarlo de las buenas costumbres y llevarlos al desorden, la degeneración y al desastre”.
Vemos que la rebeldía nunca es buena, porque falta la comprensión y el amor. Reflexionando los jóvenes en este caso, buscando la orientación de sus padres, de sus maestros y de los que saben más, podrían evitar serias dificultades de rebeldía por falta de discernimiento. Es bueno que los jóvenes logren su independencia y salgan de la obediencia infantil; pero no por medio de la rebeldía que, por tener una venda en los ojos, no ven bien la realidad.
La rebeldía en los adultos es igualmente dañina como medio de perturbación y desorden. Se trata de la acción de la Voluntad; pero sin el Amor ni la Sabiduría.
Saludos y bendiciones
AE/pch
La rebeldía es un acto de antagonismo, resistencia y protesta contra algo que no aceptamos y nos quieren imponer. El diccionario lo define como delito contra el orden público, cuando va más allá de la resistencia pasiva, por medio de acciones violentas de desorden de causan perturbación.
El Amado Maestro El Moría, dice en lo referente a la rebeldía de los adolescentes: “Ellos se expresan de esa forma por inconformidad hacia sus padres, a todo patrón de conducta impuesto por la sociedad de manera convencional. La esencia de ese cambio está que al cumplir catorce años, les corresponde ya salir de la obediencia y comenzar a tomar decisiones por sí mismos, sin embargo, la tendencia de querer liberarse y ser ellos mismos es canalizada en forma no correcta, como rebeldía hacia todo lo existente. Por ello, los jóvenes pueden ser manejados con facilidad, para alejarlo de las buenas costumbres y llevarlos al desorden, la degeneración y al desastre”.
Vemos que la rebeldía nunca es buena, porque falta la comprensión y el amor. Reflexionando los jóvenes en este caso, buscando la orientación de sus padres, de sus maestros y de los que saben más, podrían evitar serias dificultades de rebeldía por falta de discernimiento. Es bueno que los jóvenes logren su independencia y salgan de la obediencia infantil; pero no por medio de la rebeldía que, por tener una venda en los ojos, no ven bien la realidad.
La rebeldía en los adultos es igualmente dañina como medio de perturbación y desorden. Se trata de la acción de la Voluntad; pero sin el Amor ni la Sabiduría.
Saludos y bendiciones
AE/pch