Buenas tardes, sabido es que en algunas ocasiones cuando se marca ebó u otras obras, sucede que por determinadas circunstancias hay muchos impedimentos económicos (dificultad para afrontar los costos de tales o cuales consagraciones o ebó) que no le permiten efectuar a la persona referida dicha obra o ebó en el acto en que es prescrita.
He llegado a escuchar a algún mayor decir que un ebó que se hace tarde es lo mismo que un ebó que no se hace, con sus correspondientes consecuencias.
¿Qué opinión les merece este aspecto? ¿Qué criterio se utiliza para indicar que una obra se ha hecho tarde o demasiado tarde?