• Al alba (o cuando se despierte).
Sitúese de cara al Este, haga el signo de «El Que Entra» (descrito en el RMDP), luego, manténgase muy derecho con los brazos alzados como si soportara una pesada barra sobre la cabeza. En voz alta (si es posible, si no, silenciosamente), rece: Yo os saludo a Vos que sois Ra al salir, a Vos que sois Ra en vuestra fuerza. Que viajáis por los cielos en Vuestra barca cuando se levanta el Sol. Tahuti brilla con su esplendor en Vuestra proa, y Ra-Hoor lleva el timón. Yo os saludo a Vos, yo habitante de la noche.
Finalmente, golpee el suelo una vez con el pie izquierdo y llévese el dedo índice a los labios, como si ordenara a alguien que mantuviera silencio. De hecho, este gesto se conoce como el «Signo del Silencio» o el «Signo de las Horas».
Tahuti es la palabra egipcia del dios conocido comúnmente como Thot. El resto del simbolismo puede entenderse fácilmente consultando un libro sobre dioses egipcios.
• Al mediodía.
Sitúese de cara al Sur, haga el signo de «El Que Entra». Forme el Triángulo de la Manifestación, pero sosténgalo ligeramente por encima de su cabeza (aquí representa el elemento Fuego, como la figura anterior representaba el elemento Aire). Diga:
Yo os saludo a Vos que sois Hathoor en Vuestro triunfo, a Vos que sois Hathoor en Vuestra belleza, que viajáis por los cielos en Vuestra barca cuando el Sol está a medio camino. Tahuti brilla con su esplendor en la proa y Ra-Hoor lleva el timón. Yo os saludo a Vos, yo habitante de la mañana.
Haga el Signo del Silencio.
•A la puesta del sol.
Sitúese de cara al Oeste, haga el signo de «El Que Entra».Forme el triángulo con las manos, pero hágalo encima de su estómago, con las palmas hacia usted, los pulgares hacia arriba y los dedos señalando hacia abajo. Esta posición, o forma de Dios, representa el elemento Agua. De este modo, tiene un triángulo que señala hacia abajo delante del estómago. Diga: Yo os saludo a Vos que sois Tum al ocultaros, a Vos que sois Tum en Vuestra alegría. Que viajáis por los cielos en Vuestra barca cuando el Sol se pone. Tahuti brilla con su esplendor en la proa y Ra-Hoor lleva el timón. Yo os saludo a Vos, yo habitante del día. Haga el Signo del Silencio.
• A medianoche (o antes de acostarse).
Sitúese de cara al Norte, haga el signo de «El Que Entra». Luego, dé un paso hacia adelante con el pie izquierdo y levante lamano derecha por encima de su cabeza, con la palma hacia delante, como si saludara. Debe encontrarse en la misma posición que adoptan los indios en las películas de vaqueros cuando levantan la mano y dicen: «¡Hau!». Ahora diga: Yo os saludo a Vos que sois Kefirá cuando os escondéis, a Vos que sois Kefirá en Vuestro silencio. Que viajáis por los cielos en Vuestra barca en la medianoche del Sol. Tahuti brilla con su esplendor en la proa y Ra-Hoor lleva el timón. Yo os saludo a Vos, yo habitante de la tarde. Haga el Signo del Silencio. Evidentemente, la forma de Dios que aparece en elesquema anterior representa el elemento Tierra.
Trabajo superior para las Cuatro Adoraciones
Si las Cuatro Adoraciones le parecen muy sencillas, puede que desee añadirles las visualizaciones siguientes.
Los propósitos generales son:
1. Conseguir que usted sintonice con los cambios del Sol.
2. Conseguir que usted sintonice con los cuatro elementos mágicos.
3. Conseguir que usted sintonice con el universo y, por lo tanto, con lo Divino.
Las visualizaciones:
1. Cuando mire hacia el Este al alba, visualícese impregnado de color amarilloy lleno de las cualidades del aire: calor y humedad.
2. Cuando mire hacia el Sur a mediodía, visualícese impregnado de color rojoy lleno de las cualidades del fuego: calor y sequedad.
3. Cuando mire hacia el Oeste a la puesta del Sol, visualícese impregnado decolor azul y lleno de las cualidades del agua: frío y humedad.
4. Cuando mire hacia el Norte a medianoche, visualícese impregnado de los colores de la tierra fértil, principalmente de verdes y marrones, y lleno de las cualidades de la tierra: frío y sequedad. Para terminar con esta parte, quisiera insistir en que el ataque psíquico auténtico es algo muy escaso. Una vez supe que estaba siendo víctima del ataque psíquico y decidí no hacer nada, para ver qué ocurría. El resultado fue que me llegaron seis libros gratuitos por correo y un cheque de 50 dólares. Sin embargo, la sensación de ser víctima del ataque psíquico puede ser muy real, de modo que le ánimo a aprender las técnicas de esta lección. Además, no deje de realizar diariamente las Cuatro Adoraciones. Yo mismo, aunque esté enfermo, siempre puedo dedicar unos segundos a realizarlas.