"YAH" Seré Quien Seré
 


No existe registro para la correcta pronunciación del nombre de Dios, por lo tanto, no podemos decir cuál es el nombre “verdadero” de Dios.  

Sin embargo, Shemot (שְׁמוֹת), "Nombres" 3:13 y 14
"Éxodo 3:13
Contestó Moisés a Dios: «Si voy a los israelitas y les digo: El Dios de vuestros padres me ha enviado a vosotros; cuando me pregunten: ¿Cuál es su nombre?, ¿qué les responderé?»
Exodo 3: 14
Dijo Dios a Moisés: «Yo soy aquel que soy.» Y añadió: «Así dirás a los israelitas: Yo soy me ha enviado a vosotros.»"

(אֶהְיֶה אֲשֶׁר אֶהְיֶה, ehyeh asher ehyeh, [ehˈje aˈʃer ehˈje])

Esta expresión es paradójica, tanto una respuesta como un rechazo a responder.

Dios quiere hacerle entender a Moisés que se manifestará según su plan.
¿Cuál es Tu nombre, cómo Te llamas Tú? responde: “ehyeh ´asher ´ehyeh”, lo que mal se traduce como “Yo Soy aquel que Soy”, porque significa realmente: “Seré Quien Seré.”
Ehyeh-Asher-Ehyeh (a menudo contraído como YO SOY) «Yo Soy el que Soy».
Encontramos a menudo la afirmación de Dios “Jah” sobre todo cuando Dios llamó a Moisés en el Oreb y Moisés parecía curioso a tal punto que quiso saber si Dios tenía nombre. Pero Dios le respondió así: “Seré Quien Seré”


Cuando Dios dijo “ehyeh ´asher ´ehyeh”, ¿estaba mencionando Su nombre?.

YHWH. Estas cuatro letras fueron traducidas muy ligeramente como Jehová. Sin embargo, no existe sonido de “J” en el hebreo. Por lo tanto, una mejor aproximación del nombre de Dios, sería Yahvé.


"YAH"

Profetas que llevaron el nombre poético de Yah  
Ejemplo: YeshaYah=Isaías
YirmeYah=Jeremías, Eliyah=Elías,  Mattityah=mateo,
etcétera.


El nombre apropiado de Dios es, “JAH” (Seré Quien Seré), lo cual en forma transliterar se tradujo al español e inglés como YHWH.

Sin embargo, un problema adicional en la pronunciación del nombre de Dios es que el hebreo antiguo no usó designaciones vocales cuando se escribieron las Escrituras; solo se usaron consonantes. Por lo tanto, si escribiéramos en el idioma español, la frase: “El nombre de Dios es YHWH”, lo haríamos así: “l nmbr d Ds s yhwh”.


Esto no presentaría ningún problema a los hebreos porque sabían cuáles eran las palabras y cómo pronunciarlas. No fue sino después de cientos de años, que los judíos empezaron a incluir lo que se llamó “puntos vocales” en los textos copiados del hebreo del Antiguo Testamento. Pero desafortunada mente para nosotros, todavía no sabemos exactamente cuál es el sonido correcto de esas vocales.